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Que sería directamente un suicidio ¿No? Quien podría saberlo, pero en fin. Había recibido el nombre de con quien estaba interactuando, lo mínimo que podía hacer en ese momento era presentarse.

— Guru Fave, sir Jarrus. No provengo de la nobleza y si lo fuera, aún pediría que me llame por mi primer nombre, un gusto. — Aún con lo "intimidante" que se podría llegar a ver, en verdad no había mucho que se pudiera hacer, el traje estaba hecho de esa manera pero quien estaba dentro, actuaba de una manera tan contradictoria a decir verdad o al menos, a lo primero que pensarías al ver a alguien con aquellas pintas.

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De solo llevar su capa lejos de su cuerpo, que la misma solo estuviera cubriendo su espalda, una forma verdadera de decir o mejor dicho, mostrar que no estaba ocultando nada, quizá nada peligroso pero si su cuerpo en general, estaba curiosa y bizarramente totalmente cubierto por aquellas prendas que estaban maltratadas por un aparente viaje de aventuras; Quemaduras, zonas cristalizadas por hielo, zonas con tela de posibles arañas gigantes al igual que un desgaste en las secciones que realmente parecían armaduras.

— ¿Ruinas? Hm... Si digo que sí, ¿Me invitará a pasar? Aunque primero debería ir con un herrero o en su defecto un buen sastre.— Observó a Jarrus a detalle... Realmente era un ser imponente, no solo por el aura que desprendía, sino que también por esa altura que llegaba a superar a Guru por más de una cabeza la cual, aún pese a eso, no se sentía realmente intimidado... bueno, no lo suficiente como para actuar en contra del líder de la zona, cosa (...)

— ¡Hah! Desearía ser lo segundo, Sir. — Exclamó mientras veía de reojo a la persona frente a él, claramente la confianza era algo que poseía, incluso a niveles que lo llegaban a sorprender ¿Cómo no? Estaban en su terreno después de todo, quizá... Podría darse la libertad de bajar la guardia, aunque claro, ya estaba así desde que había llegado, después de todo ¡Cómo puedes estar atento a algo como tu propia seguridad en un escenario lleno de algo que te llama la atención! Acciones o bueno, una forma de actuar quizá boba, pero no lo suficiente como para distraer a Guru, al final de todo, su encomienda principal al llegar a esas tierras era el solo hecho de poder aprender de todo lo que esos seres tenían para dar,

— Quizá un... ¿Cuál era la palabra? Alquimista o médico. Mata-sanos también llamado en tierras lejanas, diferentes nombres se atribuyen a lo que hago en verdad. — Mencionó en un tono realmente afable ¡Incluso tranquilo! Mientras se encargaba (...

En aquel instante se acercó al puesto que estaba frente al hombre de la máscara de cuervo y asintió con calma hacia el mercader, uno que solía traer artefactos interesantes de sus viajes. De ese modo Jarrus acotó hacia este. — Valus, espero te encuentres bien, ¿Encontraste algunos "trinkets" interesantes en tu última expedición? Sobre todo los de ámbito mecánico, he encontrado algunas variaciones y creo que las piezas que hemos hallado en las ruinas Dunmer no son realmente tecnología gnómica. — Fue de ese modo que sus ojos se movieron hacia Guru y añadió. — ¿Qué opina caballero? ¿Ha visitado las ruinas de Shar Azath? —

El varón entrecerró sus ojos, pues no se le notaba tan convencido cuando Guru dijo entonces que era simplemente un turista, pero esa mirada sospecha se sosegó cuando dijo entonces que buscaba conocimiento constante. En ese instante, el Goliath de largos cabellos, cosa que era inusual en su raza, asentiría con suavidad escuchando su explicación, y un deje de esperanza apareció en él acotando. —¿Conocimiento? ¿A caso un erúdito o mago? — Se preguntaba si en sus errantes caminos había visto el panfleto de "Se Busca Ayuda", con respecto a hechiceros y escribas.

En ese instante el varón entrecerró sus ojos cuando Guru habló sobre el respeto que le tenían y por ende simplemente añadió. — Soy el Capitán de este fuerte, y el líder del pueblo que se ha formado dentro de él. Mi nombre es Jarrus Stormhand, y mi mano derecha es mi hermano Bjorn. —

No mayor fue la reacción que tuvo solo volteando al escuchar una voz que se dirigía a él ¿De quien se podría tratar? Una presencia que aparentemente al ver a otras personas, traía cierta alegría ¿Orgullo? Muy pronto para predecir de qué iban aquellas miradas dirigidas al individuo de cabellos morados. Guru simplemente se quitó el sombrero a la par que daba una reverencia casi salida de algún teatro solo para alzar la cabeza en los últimos instantes.

— Un simple turista. Quizá mejor dicho, alguien que busca el saber cómo pan de cada día... Por lo que percibo, usted ha de ser bastante respetado por estos lares ¿Puedo saber de quién se trata? — Consultó mientras se volvía a colocar el sombrero y ponerse recto. Lo observaba detrás de esa máscara con notable interés, no todos los días podías encontrarte con alguien que no fuera solamente un bárbaro y bueno... Tuvieras que encargarte de él.

La investigación era un rumbo constante, detenerse podría considerarse no más que un simple descanso, después de todo, ¿Cómo se recompensa a sí mismo alguien que solo busca el conocimiento? Las preguntas aparecían y no dejaban de tener hipótesis a respuestas dentro de la mente de Guru, quien, solo reaccionó al ver de reojo un papel llegando a sus pies alzandolo para poder verlo de una mejor manera, tener "claro" qué es lo que había llegado a su propia zona alzando la ceja tras la máscara a la par que simplemente lo doblaba guardándolo en un bolso de cuero.

Bajando su sombrero con suavidad, pudo notarse como los mercaderes y pueblerinos lo saludaban, y a diferencia de su más animado hermano, este solo asentía hacia ellos mientras avanzaba de vuelta a la torre ya con su cabeza más despejada, cuando de repente uno de estos panfletos llegó a los pies de Guru, quien notaba esa misiva sobre reclutamiento, tanto de soldados, como erúditos o magos.

Mientras la ventisca soplaba en medio de la mañana, y sosteniendo su sombrero, el Brujo y líder de la ciudad observaba a un peculiar hombre con máscara de plaga y sombrero también, alguien que no había visto antes allí, por ende curioso como era comenzó a moverse hacia este. Algunos pueblerinos se veían paranoicos ante ese "look", pero fue cuando Jarrus susurró. — ¿Un doctor de otros lares? ¿O solamente haciendo portando una moda interesante? —

Después de tomar aquella bocanada de aire, simplemente entrecerró sus ojos y se mantuvo observando hacia el cielo pensativo por unos momentos, el hombre de cabellos purpúreos frunció el entrecejo al notar que la respuesta de otros hechiceros había sido casi nula. Por ende comenzó a bajar por las escaleras notándose como varios panfletos de reclutamiento volaban por los aires en las calles del mercado de la Ciudadela, cosa inusual, pero pensaba que probablemente alguno de los mensajeros había perdido unos de camino, por ende tomó uno de estos y continuó su camino.

❝ El aire esta limpió ❞ Susurró casi para si mismo mientras se encargaba de caminar a paso lento por la zona metropolitana de la ciudadela. Aquellos mercados llenos de productos de índole tanto mágica como mecánica ¡Claro! Nada menos se podía esperar, después de todo ¿Cómo no asombrarse? Libreta y pluma, observaba y boceteaba casi al mismo tiempo mientras consultaba respecto a los artefactos; funciones, utilidades, etc. Sus ojos, aún tras esos glasses de iluminaban y era perceptible para aquellos vendedores que aparentemente, deseaban sacar un dinero extra de aquel extranjero quien, simplemente observaba sin respuesta para ir al siguiente puesto.