Espero que así sea, mereces felicidad, en todo aspecto.

Tienes razon... solo quiero que mi vida mejore y que mi hijo sea feliz con su padre aunque no pueda ver a ltros de su especie.

¿Y el cambio de tu esposo no sería un cambio de vida para ti?
Me refiero... Sería lindo que dejara de ser tan brusco y cruel contigo ¿No?

Yo espero que mas que cambiar mi vida... cambie a mi esposo -suspira suavemente, mirando triste hacia abajo despues de aquellas palabras-

Verás que también tendrás a tu pequeño tesoro en tus brazos pronto.
No hay nada más valioso, Meiren~

—Miraba a su pequeño con total devoción antes de mirar al dragón de nuevo, sonriendo.—

Te cambia la vida~

Oh? Su padre era moreno? Vaya, hubiera estado bien que sacara su tono de piel si -comenta sonriendo suavemente- No me extraña que sea tu pequeño tesoro... es tu hijo despues de todo~

¿Verdad que si? Es mi pequeño tesoro~

—Orgulloso, abrazó de nuevo al pequeño contra su cuerpo, dejando un pequeño beso a su frente, ya más relajado al verlo tan calmo.—

Aunque... yo veo la viva imagen de su padre en él. Me habría encantado que también sacara su tono de piel, igual a la canela~

Hola Tai Feng~ -le saluda agitando su mano suavemente frente al niño, abriendola y cerrandola luego a modo de saludo- Es hermoso la verdad.

Estoy seguro que si, será muy precioso~

—Acomodó al pequeño para que pudiera mirarlo. Estaba despierto y jugaba con sus manitas, terminando por mirar a aquel extraño con sus grandes ojos carmesí.—

Saluda, mi amor~

Tai Feng... que hermoso nombre, es un bebe hermoso la verdad, quisiera que el mio se pareciera a mi -comenta sonriendo y acariciandose el vientre, lo hacia bastante ya por costumbre- Y los conserva?