Sintió el abrazo de la pelirroja en su espalda, y entre cerro los ojos, no es que le molestará ese tipo de situación, pero una semana... ¿quién no estaría irritado luego de andar peleando una semana?, o más bien, qué le estuvieran instiendo durante una semana limpiar esa cosa.
— Callate, Misaki, te aseguro que me voy a vengar.
- Bien... — Dijo bostezando y para sumar problemas el niño se puso a llorar por primera vez en mucho tiempo, eso era una molestia, no podrían dormir de nuevo así otra vez o sería un grabe problema.
- Tch... esto es un problema... — Se levanto rápido con ella en brazos y fueron al baño enseguida, tendría que esperar hasta que terminaran de despegarse, luego se bañarían adecuadamente, por lo menos tendrían que hacerlo esta vez rápidamente.
