« Back to Album · Next »
Eғᴇᴄᴛᴏs ᴅᴇ Lᴜɴᴀ Lʟᴇɴᴀ | Rᴏʟ ᴄᴏɴ Sɪʀɪᴜs
 
Newest First | Oldest First
SsB1575505 · M
—Puedo vivir con eso, anda, debemos volver, o es que acaso la srita. McKinnon desea correr más riesgos está noche — Su mirada se mantuvo fija en ella, hacia frío incluso él lo sentía, se acercó más y ofreció su mano a la chica— Vamos, volvamos, podemos terminar esta charla en otro sitio si bien lo deseas — Espero a que ella tomara su mano, debían volver después de todo, aún que no directamente a los dormitorios, aún podían vagar un poco por ahí —
Rodó un par de veces los ojos, en especial al saber que ya se había delatado sola cuando le observaba durante clases o recesos. Antes de otra cosa, también comenzó a acercarse al contrario a un paso algo lento, pausado. —No sería mala idea, pero si regreso no tendré sueño y terminaré culpándote si no me levanto para la primera clase.— Bromeó y mostró una sonrisa ladina mientras la ocultaba con una de sus manos. Sabía que debían volver, pero había algo que le pedía a gritos no irse, no todavía.
SsB1575505 · M
—No debiste salir tan tarde— Respondió mientras se acercaba a ella, al menos ahora no estaba sola. Le miro y rio un poco por el argumento que ella le daba — Se que me observas no tenías que decirlo. Es muy obvio el interés — Trato de mantener las cosas...calmadas, no hablaria de las miradas que le dedicaba por las que había que no le era indiferente— Será mejor volver—
—¿Yo? ¿Nerviosa? Para nada, solamente era el... el frío, sí, eso.— Dijo mientras se cruzaba de brazos, fingiendo que no había sentido nervio alguno con anterioridad. Aunque no lo parecía, tenía cierta razón en que algo podría atacarla estando completamente sola en la noche, en especial si se encontraba en el Bosque Prohibido, lugar de varias criaturas salvajes. —Más nervioso pareces tú, en especial cuando nos encontramos en los pasillos. No creas que no te he visto cuando pasas con tus amigotes.—
SsB1575505 · M
—Me lo han dicho muchas veces — Respondió sin inmutarse y sin borrar su sonrisa, debía admitir que deseaba reírse desde mucho antes pero debía mantener las apariencias al menos un poco más — La misma pregunta estaba por hacerte, no deberías estar aquí, podrías lastimarte, alguna criatura podría querer cazarte — Mientras decía esto daba pasos entorno a ella — Parecias algo nerviosa cuando te encontré —
Al ver cómo aquel joven azabache salía de su escondite, la rubia suspiró completamente aliviada, aunque detestaba admitir que era de su agrado, al menos sabía que alguien conocida era quien estaba por aquellos alrededores y no algún otro estudiante o criatura que quisiera atacarla.

—¡Sirius! Eres de lo peor...— Alcanzó a decir mientras bajaba su varita para poder guardarla nuevamente como cuando apenas iba al bosque. La sonrisa que mostró el contrario logró cautivarle por unos segundos, haciendo que devolviera la sonrisa de la misma forma al darse cuenta que todo ese pequeño tiempo pudo ser vista por él. —¿No deberías estar en tu dormitorio? No deberías estar aquí a tan altas horas de la noche, Black.—
SsB1575505 · M
La actitud que la joven tomo ante su acecho le encantó, no podía esperar menos de ella, la había observando antes, más de lo que le hubiera gustado admitir.
De ser posible hubiera reído a carcajadas al oírle llamar a su amiga, a eso se había reducido la situación a creerse parte de una broma, esto había tomado un giro interesante, por lo que manteniéndose tras de aquel árbol se movió con cautela, cambiando así de posición recupero su forma humana, sacudió sus ropas para salir detrás de aquel árbol— ¿Interrumpo? — Pregunto con aquel aire despreocupado que le caracterizaba mientras sus labios dibujaban una sonrisa—
Sin duda alguna, Marley sabía que era completamente acechada. Sus reflejos eran bastante agudos gracias a su posición como Buscadora en el equipo de Quidditch, por lo que no faltó mucho para distinguir aquella figura oscura que había seguido con anterioridad. Al verle acercarse, solo extendió el brazo que portaba su varita, no pronunció ningún hechizo, no deseaba herir a quien solamente veía por las sombras. Claro que había soltado un suspiro, por la impresión de ver aquellos ojos a la luz de la luna. No fue capaz de huir, sino que quería ahora convertirse en la depredadora, siguiendo el rastro de eso que había podido distinguir con la poca luz que entraba por los abundantes árboles.

—¡Oye!— Gritó hacia lo desconocido, ya no temía si alguien iba a escucharla o no estando ahí, solamente quería resolver el misterio que abundaba en su cabeza: ¿qué es o quién es el que intenta jugarle una broma? [c=#660000]—¿Me estás jugando una broma, Dori?—[/
SsB1575505 · M
La vio salir con lentitud, pensó en un momento que tipo de aparición sería la más fortuita, ladeó la cabeza desde lejos sin dejar de mirarla, fue en ese momento en que empezó a caminar hacia a ella, lento, sigiloso, para luego aumentar el paso pero no acercándose, si no buscando una nueva ubicación desde la cual gruño, dejo que la luna iluminará sus ojos.

Deseaba ser visto por ella, que imaginara a qué tipo de criatura se estaba enfrentado, quería ser testigo del valor de la chica o de su huida, cualquiera que fuese su reacción, no deseaba perdersela.

Gruño una vez más, para luego correr como si fuera a atacarla, pero desviando su camino hasta detrás de un grupo de árboles.
No, no era asustadiza, mucho menos cobarde, pero aún así se sentía como nunca antes, como una pequeña presa. ¿Una Gryffindor sintiéndose presa? ¿Por qué? Tal vez era el hecho de estar en un sitio completamente desconocido, al menos a sus profundidades y solo había sido explorado por algunos estudiantes que recibían castigos o clases especiales sobre criaturas que habitasen por ahí.

Escuchó como aquellas hojas crujían, ramas; cada uno de los ruidos la hacía mirar de un lado a otro, ahora con varita en mano y apuntando hacia el frente, sin pensar jamás en su retaguardia. Aún no quería salir de su escondite, aunque fue asomando, muy lentamente, su cabeza, buscando aquel impostor, aquel que estaba conmemorando sus sentidos con más y más ruidos hasta que cesaron. Sin más, ya que había nuevamente silencio, fue saliendo, a paso sigiloso, no sabiendo si se arrepentía de haber salido sola o si volvería para contar la anécdota a sus compañeras y amigas.

Add a comment...
 
Send Comment