- ¿Mamá? -Parpadea curiosa, más de lo normal- ¿Taberna? ¡Hay, cochinito! Cham Cham no tenía idea de que aún estás con tu mami. Cham Cham jamás apartará a un pequeño ser de su madre. -Termino de comer el gran plato con comida y luego acariciaria la cabeza del regordete cerdo.- Los dioses me han bendecido por colocarte en mi camino, haz ayudado a una guerrera de la élite de mi pueblo, y eso está conllevado a una gran alianza, cuando desees puedes ir, nadie te hará nada porque eres amigo de Cham Cham, y además de todo, te daré de comer delicioso maíz blanco precocido con cal y bajo la llama del nixtamal, también podré darte esos deliciosos frijoles que nuestro Dios Cintéotl resguarda en total protección a la cosecha.
-Hablaba con singular alegría con el peculiar cochinito, cuando de un instante a otro, escuchó pasos, mismos que alertaron a la joven, quién no dudó en colocar su largo boomerang frente a ella y Hawk en modo de defensiva.- -Alguien viene.
R/On: -Para Sapphire la escuela es un sitio horrible y nefasto, la negligencia y la inmundicia crece en sus acogedores pasillos, tétricos salones e inmundos terrenos. Un día decidió escapar, lejos muy pero muy lejos de aquel ambiente, odiaba ser la chica solitaria, indefensa y olvidada por todos, amén de sufrir innumerables burlas, acoso y soledad.-
-El verano estaba por comenzar, y quizá también las clases, pero Sapphire optó por tomar su propio camino y romper aquella monotonía que se vive a diario dentro de la escuela. La tristeza le invade, el odio fragmenta su corazón y el deseo de venganza nubla su mente, realmente tenía pensado vengarse de todo aquel alumno y profesor de su escuela, y la mejor manera, es consiguiendo un arma de fuego o un arma blanca lo suficientemente punzante para ejecutar un golpe único y mortal. Sin embargo, mientras caminaba por un sendero bastante tranquilo, rodeado de maleza y enormes árboles de frondosa contextura, el cielo gradualmente se iba oscureciendo, y por consiguiente, la lluvia comenzó a caer en pesadas y gélidas gotas que no demoraron en humedecer todo a su paso. Entonces, Sapphire corrió hasta vislumbrar entre las faldas de j a pequeña colina y el mar de árboles, una cabaña muy bonita y muy rústica, vió que había un pequeño letrero apenas visible por la nitidez de la lluvia: "El sombrero de jabalí", tal vez se trate de una pequeña casona que ofrece ayuda a los más despistados viajeros, sin dudar más, se adentró al recinto viendo que se trata de una especie de taberna, quizá no era lo que esperaba pero al menos podía albergarse ahí mientras la lluvia cesa.-
- En su mirada triste y solitaria, permaneció ahí en la espera, pensando si en verdad había sido una buena idea abandonar el colegio en busca de una nueva y mejor vida.-
-Sus filosos colmillos descarnan cada trozo que es separado del gran pedazo de carne que la joven disfruta. Raudamente giro su mirada a él, viendo así cuán dulce es el pequeño cerdo.- -La élite es un rango mayor entre los guerreros jaguar y los guerreros águila. -Explico a mayor rasgo y luego continuó.- Mis costumbres se han llevado a cabo durante largos períodos de tiempo, décadas y siglos han visto a mis ancestros venir y partir de ésta tierra. Mi padre, un guerrero de gran categoría, también caminó por el mismo sendero que ahora curso, él y el padre de su padre, pelearon contra la adversidad como ahora lo hago yo.
-Termino de comer viendo ahora al peculiar cerdo, acariciándole de la cabeza y ahora lo abrazaría como su fuese un peluche.- Eres adorable, dulce cochinito. Mi querida mascota, Paku Paku harían una buena amistad y quizá estarías feliz conmigo. Cham Cham te cuidará y protegerá.
*Curiosa, dulce y cándida, veía cada acción del regordete cochinito, permitiéndo que él fuese cuán hospitalario debe ser con un invitado, una señal de verdaderos modales que ella también ha aprendido a lo largo de su juvenil vida.- ¿Ñya? -Parpadeó con mayor curiosidad aún, aproximando su fina nariz al platillo que se le coloca enfrente y deleitándose con el apetitoso aroma que desprende. Silenciosamente, toma un trozo de papa cocida y finamente sazonada con su dedo índice y pulgar, luego le llevó dentro de sus labios para posteriormente comer, masticar y deglutir.- ¡ÑYAAAAA, ésto es delicioso, ñya! -Dijo con una bella sonrisa y comiendo ahora de la comida.-Tu hogar es muy bonito, pequeño. -Agregó ahora comiendo la carne, desgarrándola con ésos enormes y mortíferos colmillos que se asoman entre sus suaves labios, haciendo hincapié al peligroso felino que ronda por aquellos lares: El jaguar. -- ¡Ñya, ñya! Cham Cham vendrá más seguido a verte, y si lo deseas, puedes venir al hogar de Cham Cham, padre y madre estarán gustosos de conocerte, y quizá el oráculo del templo de Huitzilopochtli, te alabe como un bello ser que ha compartido de lo suyo con Cham Cham, la guerrera jaguar de élite, o bueno, estoy en vísperas de graduarme como guerrera jaguar de élite, es un mayor honor servir a los dioses y a mi pueblo. -Explicó mientras comía con gratitud y destreza, siempre con moderación en sus modales.-
- ¿Ñya? -Parpadea curiosa, mucho más curiosa de lo normal.- Quizá no estés enterado o simplemente los Dioses te han enviado para un fin en común, sea cual sea ese fin, Cham Cham te protegerá, pues hay muchos peligros por aquí, aunque probablemente nuestro Padre Huitzilopochtli, el señor de la guerra, siempre cuida a sus hijos, los guerreros jaguar y los guerreros águila, ambos representando a los más fieros depredadores de éstos suburbios, además padre Huitzilopochtli siempre aparece portando la forma de un jaguar negro, probablemente puede que lo veamos entre la maleza.-Explico la joven adolescente, sonriendo siempre ante el nombramiento de las deidades que gobiernan esa bellísimas tierras de suelo fértil. Cham Cham coloco su mano sobre la cabeza del cochinito y siendo muy amable con él, a su vez, un pequeño mono se acercó a ella y cruzó sus largos brazos alrededor de la esbelta cintura de la chica.- Me parece buena idea que comamos algo, dime ¿Qué te gustaría? Cham Cham puede trepar los árboles más altos y tomar los deliciosos frutos que nuestra madre de la naturaleza Tonantzin nos ofrece con amor. O tal vez, podemos nadar en las cuencas de aguas tranquilas porque siempre hay peces qué pescar y poder comer. -Explico mientras colocaba ahora el largo y mortífero boomerang entre su hombro y espalda, su arma elemental para ataques y defensa.-
-Le tomó por sorpresa que aquel bello ejemplar sea capaz de pronunciar palabras muy bien definidas, porqué a decir verdad, Cham Cham tenía pensado cazar de aquel ser para comerlo una vez que llegase de nuevo a su aldea, pero dicha idea se esfumó por completo. Entonces, en un acto de verdadera curiosidad, se aproximó al regordete cerdo, olfateandolo de cerca y esbozando una sutil sonrisa.- ¡Paku, Paku! Mira un ser de la naturaleza que puede hablar, tal vez se trate de una especie elemental que los dioses nos han colocado en nuestro camino, siendo un puente entre las grandes deidades y la humanidad. -Diria pensando en sus creencias y costumbres arraigadas a su modo de vida, una de un guerrero jaguar.- - Dime pequeño, ¿Nuestro padre Quetzalcoatl te ha enviado? ¿O quizá Xólotl, el dios de los animales te ha enviado para protegernos de la muerte? -Le cuestionó viéndole de cerca y con esa dulce mueca en su rostro, misma que cualquier jovencita puede presumir a tan temprana edad.-
R/On: - No podía evitar sentir agrado por esa regordeta y rozada criatura que está observando. Francamente, Cham Cham siempre había sido entrenada para asesinar a todo aquel intruso entre las vírgenes tierras del Dios Quetzalcóatl, pero aquel ser, era realmente lindo.- Ñya, Ñya ¿qué tal? -Le dijo al pequeño capitán de las sobras, después de haberse alejado lo suficiente de las orillas de su natal hogar, un hermoso bosque que colinda con una selva muy hermosa y salvaje, un lugar precioso pero bastante peligroso.-
