Podia siquiera culparla por esto? Desde su distancia, podía notarlo, no era un momento cualquiera, ni para el ni para ella; podía parecer tener calma, pero, demasiadas emociones procesándose a tanta velocidad ¿Es que ni su capacidad cerebral le facilitaba las cosas? No… no pudo despedirse de ella cuando desaparecio, no fue siquiera capaz de volverla a ver cuando todo su ser se desvanecio en la Speedforce, y esto era lo que mas afectaba su pecho; tanto que decir, tanto que pensar, tanto que hablar, y no tenia una sola palabra para empezar.
-Si te lo dijera, posiblemente me atacarías creyendo lo contrario. – Y en efecto, Wally la conocía bastante bien… Artemisa er… fue su chica, no sabe si su relación siquiera siga en ese estado; podía verla, tan madura, tan crecida, el tiempo no los había perdonado a los dos, como si ambos hubiesen pasado por las mismas épocas solo que en distintos lugares, como si nada de lo ocurrido en todos esos años perdidos fuese valido en ese momento.
Es asi que, sin decir algo mas, tomo su mascara, desde la mitad superior de la misma que daba con los ojos… y empezó a retirarla, quitarla poco a poco hasta descubrirse mejor: Un rostro mayor, facciones ya formadas como las de un adulto, sus pecas casi no se notaban, ambos parecen tener casi la misma edad.
-Artemisa, no estoy pidiéndote que me creas, pero tienes que escucharme.- Habia venido con una advertencia, como un ángel anunciador de la muerte… no lo diría aun, este momento… tenia que vivirlo con ella.
Habia estado meditandolo; ideas, pensamientos… tantas cosas rondando por su mente a una velocidad mas allá de lo que cualquier humano es capaz de procesar, debia planear bien como iba a dar el siguiente paso, cual debería ser su movimiento luego de haber finalmente regresado a la vida. Es curioso como puede funcionar el alma de un corredor, no estas ni en el cielo ni en el infierno, no puedes quedarte en el limbo eternamente, eres una fuerza, estas conectado al constructo mas grande de todos, y tu destino final será formar parte de el puesto que ni siquiera los dioses son tan veloces como para reclamarte.
Pero había algo mas veloz que un corredor.
Su mente se detuvo completamente cuando una voz se escucho detrás de el, la conoce ¿Cómo no reconocerla? Siendo ella parte tan importante de su vivir, con ella había compartido tantas cosas, momentos, conexiones... había recibido el impulso necesario para seguir corriendo aun cuando ya no tuviera piernas para hacerlo.
Dio un paso, su cabellera rojiza se movio ligeramente por el viento nocturno, era el, su apariencia denotaba todo el tiempo que había pasado fuera, estaba tan envejecido como los demás, ya no era el Kid Flash que ella conocía, al menos no en apariencia; mas maduro, crecido, como si todo este tiempo muerto no hubiese sido nada realmente.
La vio, y todo el mundo se detuvo en ese instante ¿Cómo hablarle? ¿Cómo procesarlo? No era un simple “Hola, ya volvi de la tienda” ambos habían tenido un inicio, un duelo y un final cuando se encontraron, simplemente no era capaz de pensar que hacer… para poder responder a este momento, ambos habían quedado detenidos en el tiempo…
Hasta que…
“Hola nena ¿Vienes aquí a menudo?” – Si, la peor frase para hablar, pero… ¿No era acaso este el Wally de siempre?-
Hay una mision que en su mente sigue haciendo eco, Wally no había regresado al plano físico solo por un simple golpe de suerte. Hace años… el desaparecio del mundo, su existencia había llegado a un punto muy parecido a la muerte, pero la verdad era que no se trataba solamente de eso. Cuando su cuerpo se desintegro, fue interceptado por un corredor oscuro de cadavérica apariencia, mismo que había llegado a reclamar su alma, la muerte negra, el Flash oscuro.
Cuando tan fatidico encuentro tomo lugar, Wally no hizo mas que correr, huir, no sabia exactamente que le esperaba si era atrapado, pero claramente no se trataría de un buen final. Fue durante esa huida fuera de la vida, fuera del tiempo, que empezó a escuchar una voz, una persona sin forma que durante su carrera mas allá de la existencia estuvo guiándolo por todo un camino de eras, y fue ahí donde pudo verlo; una mirada hacia el futuro, un espejo muy distante del tiempo en el cual.. solo fue capaz de observar miles de cadáveres sueltos sobre la tierra, amigos, enemigos, y sobre ellos: Vandal Savaje junto con un ejercito de Parademonios a su espalda, dándole la bienvenida a su gran benefactor: Darkseid.
Ese fue el futuro que su guía desconocido le mostro, mismo que seria enviado a prevenir una vez que encontró su camino de regreso a la existencia…
Cargaba con esto en su mente, no es una vista demasiado agraciada ni mucho menos algo que desea dejar pasar, mientras corria meditaba sobre esto, imaginaba que al menos un Flash… Barry o Bart, seguían existiendo por lo cual no seria raro que un velocista pasara sin mas por la ciudad, a menos claro que notaran la adicion fuera de lugar, con que no le confundan con Eobard estaba bien.
Es en esto que, mientras por su cuenta seguía corriendo, hubo una calle en especial por la cual pasaría justamente al lado de cierto vehiculo, no se detuvo a su lado, tampoco parecía querer comunicarse con su conductor, pero, sin pensarlo paro su avance varios metros delante, le estaba dando la espalda y es que en ultima instancia quiso detenerse para pensar bien sus movimientos, no podía ir de una vez con la liga, con Barry o cualquier otro sin pensar en un plan, sin explicarse, sin una historia… sin saber delante de quien se había detenido.
Sigue avanzando, sigue… debes prevenirlos, debes…”
La voz desapareció a la distancia mientras su mente volvía a aclararse, una misión entregada, un propósito para regresar del limbo al cual había sido condenado por el simple hecho de entregar su vida por otros. Era a penas consciente de lo que estaba pasando, su mente viajaba a tal velocidad que parecía ser incapaz de procesarlo todo.
Luces… Formas… Colores…
Una conciencia que lentamente retomaba forma física hasta que… una barrera se destruyó, siendo penetrada por un cuerpo el cual lentamente se paraba erguido, había regresado a la existencia, había vuelto a ver la luz con sus propios ojos.
Estaba confundido, tanto tiempo vagando en la nada como una fuerza mas en el universo lo había desacostumbrado a tener un cuerpo físico, pero, paso por paso, segundo por segundo recordaba, la mente licuada volvía a ser una sola, y asi, supo donde estaba.
-“Starlight City… pensé que jamás te volvería a ver.”
Una conocida sonrisa se dibujo sobre sus labios, en verdad una imagen hermosa y agradable, era de noche, las luces artificiales daban forma a los alrededores, nuevos edificios, nuevos puestos, había pasado demasiado tiempo fuera.
“Espera..”
Entonces recordó algo.. recordó la voz, recordó sus palabras, sabe porque esta aquí, sabe a quienes debe buscar… pero, había algo en especial que debia comprobar, por lo cual, este rayo rojizo no tardo en tomar impulso con las piernas y asi, iniciar una vez mas sus tan acostumbradas carreras por la ciudad.
