—Te entiendo, hay que ser muy firmes en cuanto a divisores, de lo contrario, ellos toman más y más terreno hasta que se quedan de forma permanente... — El ruso se las ingenió para girar y robar descaradamente un beso de sus labios mismo que devolvió. —Acepto. Me pondré cómoda entonces... ~
— Tengo que ser franco contigo... Hasta hace poco ni siquiera yo sabía donde comenzaba uno y terminaba el otro. Es agradable empezar a notar la diferencia de a poco... — Se volvió hacia la sensual intrusa y le dejó un pequeño beso en los labios. — ¿Pizza, Netflix & Chill? ~ — Le guiñó el ojo con una pequeña sonrisa de complicidad.
—Me gusta contemplarte así, al natural, siendo sólo Andrei y no Voron. No me mal entiendas, Voron también me gusta pero ahora no estamos en servicio... — Terminó de acercarse y recargó su frente en esa espalda no sin antes haber depositado un beso.
Desde que le había dado una copia de la llave de su departamento, aquellas agradables sorpresas eran mucho más frecuentes. —Eres tan silenciosa como un felino. ~
