-Escuchó atentamente la explicación del sujeto, no lograba entender muy bien del todo, con tantos nombres y lugares extraños que no conocía. Su cabeza solo se imaginaba vagamente los distintos sectores donde se hallaban las flores, sin embargo ante la última mención sobre ese país y su bondad, pensó en una madre acariciando su cabeza con gentileza, eso lo hizo sonreír, poco, pero lo hizo.-

Razor entender... Querer ir a Liyue. ¿Donde estar? -Volteó su mirada de lado a lado, en busca de aquel icónico lugar. Lo que el pequeño criado por lobos desconocía era que estaba bastante lejos de su hogar, de su verdadero hogar ya que actualmente estaba desterrado de sus tierras.-