-Escuchó atentamente la explicación del sujeto, no lograba entender muy bien del todo, con tantos nombres y lugares extraños que no conocía. Su cabeza solo se imaginaba vagamente los distintos sectores donde se hallaban las flores, sin embargo ante la última mención sobre ese país y su bondad, pensó en una madre acariciando su cabeza con gentileza, eso lo hizo sonreír, poco, pero lo hizo.-

Razor entender... Querer ir a Liyue. ¿Donde estar? -Volteó su mirada de lado a lado, en busca de aquel icónico lugar. Lo que el pequeño criado por lobos desconocía era que estaba bastante lejos de su hogar, de su verdadero hogar ya que actualmente estaba desterrado de sus tierras.-

— Son flores procedentes de Liyue. La blanca se llama flor chingxin. Crece en lugares altos y poco accesibles.

Extendió su mano y tomó una flor blanca de las manos de Razor.

— La que tiene una tonalidad rosada es la flor de seda. Es un poco más doméstica y adaptable a lugares urbanos.

Tomó otra flor de la mano de Razor y la juntó con la primera.

— La última, la violeta se llama campanita de cristal... Le gusta crecer en lugares rocosos, como las laderas de las montañas.

Y al igual que con las dos primeras, tomó la última flor del ramillete que tenía el chico y juntó a las tres flores, mirándolas de más cerca.

— Cuando las veo o las huelo. Ni puedo dejar de imaginar las bondades y lugares de Liyue.

-Asintió con la cabeza ante la pregunta y luego sus manos tomaron una por una las flores, para verlas con detalle y olerlas.
Frunció varias veces su nariz, no acostumbraba a esos olores pero eran agradables por separado.-

Oler bien... ¿Qué son?

— ¿Te gustan...?

Se arrodilló para quedar casi a su altura. Le acercó el ramillete a sus ojos, pafa que pudiera inspeccionarlo mejor. Su reacción había sido llamativa, por lo que causaba cierta curiosidad ver qué haría con las flores.

-Se acercó al extraño hombre ya que jamás en su vida habia visto esas flores En su territorio. Se puso en puntas de pie y olfateó curioso estas. Terminó estornudando hacia un costado por la mezcla de esencias nuevas y desconocidas. - Flores raras... Razor gustar.