RikuTwilight

* Las montañas cubiertas de nieve, los copos caían escarchando los arboles del lugar, todo parecía en paz, en la punta de la montaña había una pequeña casa de forma redonda color roja, un patio extenso del cual un pequeño estanque con ranas y piedras alrededor lo adornaban. Al pie de este se encontraba una pequeña aldea, a pesar de la nieve que cubría las casas, la puesta de sol se apreciaría.
Una niña de 8 años de edad, con una apariencia peculiar, su cabello rubio con puntas color negro se movería al ser golpeado por aquel helado aire, su velocidad era impresionante, fuera de la velocidad común de un ser humano, iría cayendo de árbol en árbol ágilmente, miraría divertida con unos ojos azulados, cubierto uno de ellos por un lente verde, mejor conocido como rastreador, el cual le permitía detectar el nivel de ki o poder, y la distancia en que se encontraba alguien, mientras su vestido anaranjado con azul permanecería pegado a su cuerpo, sus caletas rojas cubrirían sus piernas, y peculiarmente una cola de simio rojiza se movería divertida saliendo de ella. La pequeña no necesitaba ropa abrigadora ante tal frio, ya que llevaba un entrenamiento pesado a lado de su padre, ejercitar cuerpo y mente, y poder controlar poderes con los cual la infante ya contaba al momento de su nacimiento. Ellos no eran seres humanos, eran guerreros muy fuertes proveniente de una raza llamada Sayayin, de un planeta llamado Vegeta, que había sido destruido, y sus padres y ella habían sido sobrevivientes de la gran masacre. Ella emanaba un poder sorprendente, que aun ni sus padres lo podrían llegar a controlar incluso a comprender, pero a la pequeña Neus lo unió que le importaba era explorar y salir de la montaña en que vivía, aunque en las aldeas siempre la rechazaban por el poder tan aterrador y sin control que tenia, ella no perdía la esperanza de que había un humano que la entendiera, así que una vez más se aventuraría a entrar a aquella aldea.
Se detuvo al pie de una roca mirando la aldea momentáneamente, miraría al cielo y sonreiría al ver que empezarían a caer copos de nieve y uno de ellos se detendría en su nariz*

-Hola pequeño copo

*Lo tomaría con sus pequeños dedos y vería como se desvanecería en este. Sus labios esbozarían una pequeña sonrisa. Su radar le mostraría la presencia de algo o alguien cerca de ella*

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R/OUT: Hola espero podamos tener un ameno e interesante n.n

_Aa...hay de todo. No tengo buenos recuerdos del lugar, pero no es nada del otro mundo. Apenas ten cuidado.

_Humph, hablas con si entendieras de las cosas. De equipo hablas? Yo no confiaré en tí solo porque me lo pides. La confianza se gana.
A mí me parece que nos estás usando, pues mira chico, si asi es, ten cuidado o ten rompo en dos sin pensar dos veces!

~*El Trewa no se callaba con sus amenazas y avisos constantes que la princesa conocia muy bien. Aprovechando la distración de Argo, que seguía caminando mientras hablaba, Zephie retorcedió algunos pasos, ya que el pelibranco caminaba detrás suyo y susurró*~

_No te preocupes por Argo, es demasiado protector. No es decir que no cumpla lo que dice, apenas tiene problemas de confianza. Busca no darle motivos para que te siga molestando.

_Ya veo. No creo que entiendo muy bien lo que me dices, pero cada uno con su historia, verdad?

~*Tomó asiento en una gran piedra y escuchó cada palabra del peliblanco con especial atención*~

_Comprendo Riku. La gente a veces me llama de ingenua, pero si hay algo que sé ver, es cuando alguien ya pasó por malos momentos en la vida. Sé que veniste con buenas intenciones. No te estoy juzgando. Igual que tu o si, no más, me preocupo yo por este mundo, como dices...
Es de mi interéz, estoy dispuesta a hacer lo que sea. Cuenta conmigo.

~*Argo regresó algunos minutos después, solo y murmurando palabras no muy simpaticas*~

_Sigamos.

~*La princesa sonrió cerrando los ojos y se levantó*~

_Vamos.
Tendremos que pasar por el bosque negro. Siento escalofríos siempre que menciono ese nombre...

_Es posible. Reclaman las tierras, quieren apoderarse de todo. Pero tampoco los vas a encontrar tan cerca. Lanzheim está llena de bosques y criaturas peligrosas. En castillo queda lejos. Es decir, que llegar hasta hí, será una aventura. Pero por favor, dejame informar a los de mas de mi unidad...

Argo. Llama a los demás o que vengan cuando puedan. No digas nada a Alex... cuantos menos mejor. No quiero que me cuestione.

_No te dejaré sola con él.

_Sé cuidarme. Además, yo confio en él, sé que no me dañará. Ve. Es una Orden.

~*El Trewa nada más dijo y volvió a campamento de la unidad que representaban*~

_El sigilo tiene límites. Crees que puedes hacer todo solo?
No sé de donde vienes, pero te aconsejo, aquí las cosas no son lo que parecen y sí hay motivos para que hasta hoy nos encontremos en esa situación.

~*Ladeó la cabeza con una pequeña sonrisa*~

_Disculpa si te pareci indelicada...realmente me preguntaba el por qué. Te daña la luz o te gusta la oscuridad?

_Disfraz? Riku, no es así tan simple...

~*Detuvo sus pasos para explicarle la situación en que se encontraba*~

_Si fuera tan simple, donde crees que estaría ahora? El palacio está completamente cercado. Cualquer movimiento nuestro tan invasor, cuesta vidas. Además, queda lejos. Mi ejército trata de acercarse a un ritmo seguro, pero de cuando en vez tenemos fuertes choques...

Lo que quiero decir es...

_Zephie.

_Lo sé...

~*Revolvió los cabellos y fijó la mirada al peliblanco, aún poco segura si realmente la podía ver*~

_La manera sería vestirnos como los soldados del Norte...