RavenEngel

En 1994 grandes avances en biotecnología y genética parecían ser el pináculo previo a la llegada del nuevo siglo. La ciencia avanza y con ello también el deseo de grandes mentes en busca de nuevas alternativas para el desarrollo adecuado de la denominada "Sociedad del futuro".
La disputa por el mérito y las pautas vanguardistas llevó a muchas compañías a la búsqueda de nuevos experimentos, ya no solo se hablaba de curas milagrosas, o de plantas resistentes a las sequías, el mundo del modernismo fijó su visión en un tema que para ese momento aún era un tabú, la clonación de especies.
Para 1996 una compañía Alemana empezaba a tomar la delantera, y es que la compañía Einfer siempre fue de las más conocidas por sus increíbles avances en la búsqueda de nuevas curas para tratar enfermedades terminales. Usando como fachada su buena reputación a nivel mundial, los científicos de Einfer empezaron a trabajar en un nuevo proyecto que buscaba modificar de cierta manera el estereotipo humano, buscando con ello crear una línea de seres con cualidades únicas. Pero incluso para ellos, mantener en secreto cualquier actividad era casi imposible; pues a los medios llegaron rumores de sus actividades ilícitas, la fuga de información causó tal revuelo y la empresa tuvo que distribuir el avance de los proyectos a sus demás sucursales, siendo Berlín la planta que albergaría sus prototipos en función.
Aitor, aunque nació como un niño cualquiera fue criado bajo el régimen de una institución que nunca se preocupó de mostrarle mas que sus estereotipos e intereses, dejando de lado no solo el mundo externo, sino que también negando cualquier relación con sus propios derechos.
Fue formado con el conocimiento básico, letras números, calculos y teorías que no guardaban relación alguna con ningún hecho o fenómeno distinto a lo vivido dentro de las instalaciones.
Las interacciones entre él y los demás niños, eran supervisadas sin ningún tipo de excepción; limitadas solo al tiempo de receso, ya que sus cubículos de descanso se encontraban bajo un estricto código de seguridad.
Al cumplir 12 años una falla de seguridad en las instalaciones y una serie de eventos afortunados le dieron la oportunidad de escapar al lado de algunos compañeros, sin embargo el destino fuera de aquel infierno sería algo peor.


Siempre cumplo mi palabra.


Reglas para una sana convivencia

* No soy exigente en cuanto a la temática de rol, ni mucho menos en su extensión, pero me gusta mantener la coherencia entre turnos, así como también una ortografía entendible.

* Mi personaje es un OC creado para la interacción dentro de un grupo de rol externo sin embargo eso no limita mis actividades con personajes fuera de mi línea de tiempo, por ende, todos son bienvenidos.

* Solo me reservaré el derecho de admisión y respuesta para aquellos roles que no busque una interacción a largo plazo, o simplemente busquen molestar o desarrollar tramas fuera de mis gustos.

* Para Roles Battle, solo voy a aceptar personajes con un acuerdo común y con una ficha de personaje de antemano.

* Primordial, respeto entre personajes. Como usuarios no debe existir interacción a menos que sea algo necesario como acordar detalles o dar explicaciones sobre temas desarrollados en algún momento de la historia.

* Siempre dejaré una respuesta a cada rol sin excepciones, solo pido un poco de paciencia para ello.

¡GRACIAS!