PM1566846 is using SimilarWorlds.
Join SimilarWorlds today »
About Me
The Whiteboard is a place where people can send Gestures, Attributes, Images, Comments, and much more...
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
G1575593 · F
De vez en cuando realizar este tipo de brujería espiritual conectaba a Gianna con sus raíces, aunque ya no era usual que un ser tan experimentado como ella retomara las prácticas elementales y básicas de cualquier iniciada en las artes oscuras, hoy estaba de buen ánimo, pues las cosas estaban saliendo como lo había predicho, “a la perfección”. Así que de vez en cuando jugar con los sentimientos de los mortales, en especial de las pobres almas “cristianas”, era como un tentempié para ella. En esta ocasión, la mujer que se le había acercado estaba de suerte, podría tener “legítimo” contacto, una vez más con su difunto esposo. ¿Estaría siendo castigado por las llamas del averno? ¿Sería uno más de los afortunados en ingresar a las puertas celestiales custodiadas por San Pedro? Por suerte, Gianna sabía que la justicia después de la muerte, si era la verdadera. Pues cuando el “Santo Papa” Alejandro VI, mejor conocido como Rodrigo Borgia, había muerto por mano propia de la Virgen Negra. Ella misma se encargó de encontrarse con las temidas fauces del arcángel de la muerte para conocer la sentencia de quién en vida había sido “su padre”. En efecto, uno de los círculos del infierno era ahora su eterno hogar.

— Necesito alguna pertenencia de quién fue tu marido. —

Permaneció con la vista abajo, oculta en ese velo espectral que impedía el paso de la luz a su rostro, extendió la mano en dirección a la pobre y perdida alma del señor que esa misma tarde había caído en las garras de la desesperación. Contactar con los muertos, para ella, era un trabajo fácil, sin embargo, la mente de los seres humanos era tan frágil que en un dos por tres podría quebrarse, para bien o para mal, ella solo atendía las peticiones que solicitaban sus clientes. Por debajo de la capucha sonrió de lado, esperando.

— La buena fortuna está de tu lado… Estas prácticas ameritan pagos muchísimo más grandes, algo que ni todo el dinero del mundo, ni el oro más preciado de los reyes, pueden pagar… ¿Estarías dispuesta a todo con tal de comunicarte con tu esposo? Bien, bien, por ahora solo necesito esa pertenencia, eso que cuelga en tu cuello… ¿Qué es? —
 
Send Comment