Noiz1549823

Sus ojos se entrecerraron ante la cercanía del contrario, podía sentir su respiración, aquel aroma tan familia. De pronto y antes de que pudiera negar aquella palabras sintió como sus labios eran callados por los del contrario, un suave y cálido rose.

Levo una de sus manos hacia el torso del contrario antes de terminar aquel beso. El latir en su pecho era casi errático, podía imaginar aquel rubor intenso sobre sus mejillas. ¿Como es que a pesar del tiempo cada parte de su cuerpo reaccionaba al simple tacto del contrario? De una manera casi fugas los recuerdos salían a flote, era como si el tiempo se hubiese detenido. Solo era ellos dos, como lo eran antes.

Su mirada se volvió hacia el contrario mientras escuchaba atento cada palabra. Sin embargo, la expresión en su rostro cambio ligeramente para lanzarle una mirada de pocos amigos. — Te recuerdo que soy mayor que tu, niño. — Agrego mientras arqueaba una ceja.



Pero tenia razón. Sentía que de alguna forma hablar con Tae-san seria la segunda cosa mas difícil que podría afrontar por si mismo. Por los que, luego de sar un leve suspiro adquirió una postura decidida y asintió. — Vale ... quiero hacerlo.

El latir de su corazón ensordecía todo pensamiento que osaba cruzar por su mente. Sin embargo en su interior aseguraba echar de menos aquel efecto que el rubio causaba en él.

Haciendo un esfuerzo por dejar de lado la inquietud que venia de su pecho, volvió la mirada hacia su mano, que se encontraba sostenida por la ajena. "Era cálido". El tacto de su mano era tan suave y cálido ... así como la recordaba. Era irónico, había pasado tanto tiempo, pero en aquel momento podía asegurar que había pasado apenas un día desde la ultima vez que lo tuvo tan cerca.

— Es ... es mucha información por procesar. — Adquirió en un susurro casi inaudible.

Era cierto. Después de todo este tiempo lejos de él, aquellos días difíciles. Habia perdido total esperanza, y ahora ... se encontraba parado frente a él, enmudecido por aquella interrogante. Nunca imagino encontrarse en una situación parecida, pero necesitada darle una respuesta.

— Mis sentimiento jamas cambiaron ... — Finalmente volvió a buscar la mirada del contrario, encontrándose con sus ojos expectantes ocasionando cierto pigmento en sus mejillas. — Estuve esperando, cada dia y ahora ... estas aquí. Me hace muy feliz, no puedo describir lo feliz que eso me hace, pero ...

"Pero mi vida estaba aquí" ... "Tae-san ella...estaba aqui" Aquello era algo que oprimia sus pensamientos. ¿Podría dejar todo así como así? ¿Acaso ... podría permanecer tan lejos?

— N-No dije eso ... yo ... — Algo nervioso y buscando alargar la distancia entre ambos retrocedió un paso topándose con uno de los estantes a su espalda.

Aun no terminaba por creérselo, era cierto. Si había pasado mucho desde la ultima vez ... lucia distinto, pero no solo por su vestuario, había algo mas.

Mientras lo escuchaba, su cabeza comenzaba a maquinar un sin fin de pensamientos. Había estado con su familia ... era un hombre de negocios ... un hombre de responsabilidades. ¿Alemania? Era por eso que había desaparecido tanto tiempo, se encontraba en otro continente. No podía evitar sentirse orgulloso de él, se sentía feliz de lo que había logrado, sin embargo ... todo este tiempo ...

Fue entonces cuando aquellas ultimas palabras lo hicieron despertar. — ¿Huh? — Cuestiono parpadeando un par de veces ¿Conocer a sus padres? ¿Conocer? ¿Yo? ... — Ha- ... Hablas de ir a Alemana ... ¿Alemania el país? ...

Ciertamente le sorprendió la apariencia del contrario, si no fuese por aquella voz tan conocida y la cabellera rubia quizás hasta lo hubiera dudado. — ... Noiz ... — Adquirió mas para si mismo. ¿Donde habían quedado los múltiples pins y aquel gorro tan distintivo? — Yo huh ... — Realmente no sabia que responder, por lo que titubeo un par de veces antes de continuar — C-Creo que luce bien.

Claro que si cuñado, cuida de mi atolondrado hermano

— Ugh ... M-Mi cabeza ... — Jadeo llevando una mano hacia su frente.

Luego de aquel último ataque por parte de los diminutos conejos, su mente se nublo, solo recordaba como la oscuridad iba rodeando cada espacio del campo virtual mientras sus párpados iban cayendo. ¿Habría perdido? Quiza asi fue, en su mente solo se proyectaban fragmentos de lo que había transcurrido en aquella pelea, aquel sujeto con cabeza de conejo, quizá fue él quien lo indujo al campo desde un principio, recordó haber sido llamado "sly blue" ... aquel nombre ... le resultaba extrañamente familiar.

— ¡Uhg! Maldición ... — Un dolor agudo invadió su cabeza mientras trataba de reincorporarse. Se encontraba frente a Heibon. ¿Como había regresado? — Uh ... ¡Ren! — El pequeño allmate se encontraba recostado junto al peliazul, meneó ligeramente las orejas ante el llamado. — ¿Te encuentras bien? — Cuestiono mientras lo tomaba entre manos.

- [code]Estoy bien, según la base de datos se ha dañado cierta parte de mi memoria. [/code]

— ¿Eh? Eso no es estar bien, Ren. Lo revisare en cuento regresemos a casa — Adquirió para luego dejar escapar un suspiro.

Ooc:

Lamento la demora en responder al mensaje, Noiz. Me alegra que se encuentre bien y de igual modo yo lo estoy. Ahora, creo que sería genial el poder hablar en Off, aunque si también quisieras que se dé el inicio a un rol, podríamos hacerlo o intentar plantear la forma en qué ambos personajes se podrían encontrar. O algo así (?)

[ Saludos, gracias a usted por agregarme. No comentarios por favor. Lea mi perfil antes de comenzar (Ya que ahí está estipulado tal requerimiento, sobre los medios por los cuales podremos jugar rol) y sí, espero lo mismo que usted. Gracias por los halagos, su personaje también me parece en cierta medida interesante. Veremos lo que sucede en el camino. :3 ]

::: Bueno, elijo cruz.. –Cruza los dedos–