-Mandó la ubicación de un telo en South Central junto con su última foto, ni siquiera contestó al texto. Seguro esperaría en la entrada, sentado en las escaleras como si fuera parte de la decoración rastrera de esa zona.-
carmesí tanto en las manos como en la estructura, ignorante de todo lo que pasa alrededor suya ya que este momento es exclusivo para el cuervo, ahora repasa la insípida inquietud ajena y ojea desinteresada en detalles físicos superficiales, es John, no hay sorna mas solo ásperas instrucciones por su parte, tendrá que ser dócil, afilo su mirar siguiendo las indicaciones y asintió con el rostro en señal de comprensión.
━━ Muy bien John, al menos no recibiste otro botellazo...espero que no hayas terminado toda la diversión.
Pequeño 'toma y daca' emitido por reencuentro anterior, en su separación se dispone a caminar a su lado dando un ultimo vistazo a los alrededores, el misticismo se diluye sin importancia por lo que hace cada uno, ahora el objetivo es el edificio solitario, será paciente con las indicaciones, lo prioritario es hacer caso al demonio, era difícil controlar sus oscuros deseos y su sonrisa se fue curvando lentamente con lectura sencilla.
El tiempo pasa lento pero es relativo por la ominosa noche que hace pesado el ambiente y es correcto añadir el perderse en sus pensamientos sin saber lo peligroso que fuera ese hecho intangible pues el acecho la hubiera pillado desprevenida, el latir de su corazón se acelero con el eco recibido y cuando pudo focalizar sus amatistas vio al individuo cercarla con su cuerpo, fue necesario alzar el rostro que dibujo un inquietante semblante de temor por la sorpresa, ese protocolo hubiera sido finalmente aliviado por un entrecortado suspiro al reconocer a John finalmente, <<Hijo de...>>, la había asustado y la molesto que pudiera percibirlo por tener la guardia baja, instintivamente retiro las manos de sus bolsillos controlando su introspección lentamente.
━━ John...
No pudo añadir mucho mas, el habla se mezclo con el aliento ajeno por la cercanía que fue breve por su retirada, la normalización pudo hacerla observadora, fue instintivo ver las trazas
De pronto, algo lo detiene. Se queda perplejo de ella por un momento, había olvidado los matices y los colores, como debería haber olvidado su nombre si no hubieran hablado ese mismo día. La poca gente que transita fuera parece notar la escena, pero nadie haría nada en uno de los barrios menos custodiados de Los Angeles.-
Las direcciones del móvil son una mierda. Ven conmigo ahora, si nos ven aquí nos van a hacer mierda.
-El tono se su voz era pacífico dentro de lo que John pudiera. Sus ojos cubiertos por lentillas marrones parecían vacíos por el accesorio, por lo que se veía más normal y burdo, como si se tratase de un simple matón intromisivo. Supuso que sería lo ideal para ese momento, porque si se corriera la voz de un "homicida de ojos carmesí" tendría problemas. Se despegó de ella casi al instante, había dejado la manga de sangre con su huella dactilar en la puerta del hotel. Luego señaló enfrente, un edificio similar al que ocupan, pero totalmente abandonado.-
-"Muerto" está por demás acorde al sitio, que se ve inundado por el silencio de la ausencia, no sólo del propio demonio sino también del propio personal, pero es normal, no van a salir de la habitación del aseo. John, por otro lado, había abandonado la zona en la que esperaba apenas el aburrimiento lo dominó, por lo que llegó unos minutos después de lo indicado desde el edificio del frente, con algo de sangre en las manos que no era mucha, sólo rastros que no pudo lavar. Pero eso no fue notable hasta que la luz del hotel le alcanzó, y su mirada se alzó hasta ella con furia y desconcierto. La reconoció al instante, incluso puede que hubiera aparecido porque se dio cuenta de su presencia a la distancia.-
Oye, mujer.
-Mencionó, a la par que entraba. Se aproximó peligrosamente a ella, como si fuera a encerrarla entre su cuerpo y la puerta del hotel. Apoyó la mano en la estructura del edificio, llegando a inclunarse hasta ella para poder hablar en un tono más bajo.
Suspiro escapa de su boca pesadamente acompañado de la ejecución del cigarro con su suela, será paciente, simplemente apoyo el cuerpo contra la puerta del hotel quedando de espaldas a las escaleras introduciendo las manos en los bolsillos, recién se puede dar cuenta que no le gusta la sensación de estar sola ahí, pero fue somático el hecho de sentirse observada a pesar de no haber peligro adyacente o eso parecía y las pocas miradas que se cruzan con el croma violáceo la incomodan.
Compromiso superfluo por teléfono con el cuervo aunque necesario para concretar detalles, después de su ritual personal y retirada del tinte, sale de su apartamento, arisca es su mirada con los transeúntes, no estaba de humor con fácil lectura de su expresión facial la hace pernoctar por la avenida sin recibir ningún trato. El manto de la noche siempre hace estas calles enigmáticas rozando la cuerda del riesgo, y la retirada de un cigarro para encenderlo por el camino es requerido, repitiéndose información.
━━ <<Hotel, South Central, pasadas las 04:00 AM>>
Llego al lugar requerido, desarmada pero respaldada por el azabache, hoy bailara con el demonio y dejara que le susurra el camino esperando que al menos tenga la consideración de desinhibir su mente con algo de alcohol, inspecciono el área entrando en el hotel, "mala muerte" se le quedaba corto pero propio de John, se asomo en la recepción sin ver nadie por el momento.
