**Por su parte ella, tan sólo llegando a su habitación, suspira largarmente una y otra vez, intentando controlar su violento palpitar, tan sólo para murmurar para si.** No hay nada... no habrá nada... y no está bien que estorbe, controlate.
Igualmente, majestad. -Ejerce una leve reverencia tanto de saludo como de respeto a la vez que emite sus palabras. Más cuando ella se retiró simplemente se relajó por completo, saliendo de ese papel tan serio que llevaba con todo mundo.- ¡Qué incómodo!
**Por unos momentos se queda simplemente con la mirada desviada, sin embargo lo siente observarla, sólo lo mira de reojo, aumentando su rubor, para levantarse en seco y exclamar.** ¡Buenas noches que duermas bien! **Sin más se dispone a salir encarrerada de la habitación.**
-Toma aquellas prendas que anteriormente había tirado al suelo para vestirse una a una con total normalidad. Cuando terminó tan solo se quedó en silencio viéndola con ese semblante serio característico suyo.-
¿Ehhhh? Ah... si... ya puedes... **Responde distraída y nerviosamente, riendo apenada después, al mismo tiempo que se grita interiormente no portarse como una idiota.**
¿Ya puedo vestirme? -Cuestionó expectante a su orden. Realmente no le estaba prestando mucha atención a su reacción, solo procuraba seguir al pie de la letra sus exigencias.-
**Pese al rubor, y a la vergüenza, palpa con normalidad para buscar heridas que curar. Tan sólo colocando algunas en los raspones, para luego decir, desviando la mirada.** Parece que todo está... bien... **Sin embargo, por dentro hay un chibi de ojitos brillantes, sumamente encantada.**
-No emite palabra y sin mucho rodeó se quita su parte superior, prenda por prenda para dejar al descubierto ese perfecto cuerpo trabajado, con alguna que otra cicatrices por los entrenamientos.-
**Cuando termina de limpiar y desinfectar las heridas, coloca curaciones en las más contundentes.** Quítate la ropa. Necesito ver si hay más. **Ordena como si nada, pese a la incomodidad que pueda surgir de él.**
