MikhailPrakliaty

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Tras la batalla en casa de la luz de dios, en la cual sacrificó su cuerpo por romper la barrera que les impedía ingresar a la mansión para recuperar la reliquia, Mikhail regresó al infierno para recuperarse.

Después de una larga temporada en casa, pudo recuperar su energía para volver a construirse un cuerpo humano, con algunas mejoras, esta vez elige una apariencia un tanto más madura aunque conserva el cabello albino.

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Xandras

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Es la representación de la perfección, una harpía otorgada por Lyanna como su familiar después de un exitoso ritual de invocación.



[med]~ Historia ~[/med]
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Cameron Collingwood nace en Londres en el año 1333 en una familia acaudalada y de abolengo. Desde un principio fue diferente de los demás chicos del barrio, reservado con la mayoría aunque bastante cruel y travieso con aquellos a los que les tiene confianza, siempre fue de jugar pesado pero no al punto de lastimar de gravedad a nadie.

Su cabello blanco y sus ojos color marrón llamaban demasiado la atención en esa época, tanto que para algunos de los habitantes de la ciudad, era como una maldición por la que preferían evitar cualquier contacto con la familia.

Era muy unido a su padre aunque, por alguna razón que no comprendía, su madre parecía no soportar su presencia. Siempre buscaba agradarla pero ella le huía, incluso llegó a prohibir que lo dejaran entrar a sus aposentos. Esta situación lo marcó desde muy pequeño y su padre siempre trataba de mantenerlo ocupado, pensando que de esa manera, se olvidaría del evidente rechazo de su progenitora.

Los sirvientes y las mascotas que su padre le llevaba eran sus grandes amigos y compañeros de juegos. No tuvo hermanos así que estas personas eran su familia. Los vecinos y conocidos de la familia, optaban por no jugar con él pues decían que tenía un aura oscura.

A pesar de todo, se podría decir que vivió feliz durante su infancia y parte de la adolescencia, en medio de la peste que azotaba al país, su familia fue de las pocas que más duraron sin sufrir las inclemencias de la enfermedad. Esto ocasionó envidias entre aquellos que no habían tenido tanta suerte, incluso dentro de su familia cercana.

Al cumplir los 17 años, descubre por casualidad la traición de su madre, un amorío con su tío Cedric. Pasó varios días pensando en la forma más correcta de contárselo a su padre sin embargo, un imprevisto se le adelantó. Casi un mes después de que mirara a Cedric y Alina besándose en el estudio, estos decidieron deshacerse de los estorbos.

Cedric asesina a su hermano en el jardín de la mansión, haciéndolo parecer como obra de los manifestantes callejeros que ocupaban la ciudad pidiendo la intervención del rey para terminar con la plaga.

Para mala fortuna de los amantes, su plan no fue perfecto, aquella noche uno de los sirvientes se encontraba en el jardín en el momento en el que todo sucedió. Agazapado entre las plantas, permaneció oculto hasta que el sitio fuera seguro y luego corrió al cuarto del joven amo para contarle lo sucedido. Este de inmediato fue a ver a su padre quien conservaba aún un leve soplo de vida. Con la cabeza recostada en el regazo de Cameron, aquel hombre le regala una última palabra antes de que su vida se extinguiera: “Vive”

En pos de respetar aquel deseo de su padre, a pesar de toda su rabia, finge creer que fue la gente del pueblo que luchaba con la peste quienes le arrebataron a su padre. Planeaba como vengarse pero no encontraba la forma perfecta de hacerlo.

Fue ahí cuando ocurrió el primer contacto con un ser que le ofrecía una forma de venganza, a cambio solo tendría que dar su alma. No aceptaba pues el deseo de su padre era que él viviera y no se puede vivir sin alma. No recuerda cómo sucedió pero noche tras noche recibía ya la visita de aquel ser que siempre estaba oculto en la oscuridad, solo le mostraba sus ojos azul brillante y siempre le hablaba por telepatía, lo que a veces le hacía pensar que se estaba volviendo loco y todo era una invención de su cerebro.

Después de un tiempo se terminó la suerte en la mansión y la peste alcanzó a los sirvientes; uno a uno comenzaron a morir sin embargo, su madre y su tío seguían sanos y haciendo planes para escapar de la ciudad y de la peste, con ello se escaparía también la oportunidad de la venganza. Cruel destino el suyo pues terminó contagiándose y su cuerpo se degradó rápidamente.

Así pues, decide aceptar la oferta de aquel ser de oscuridad que ya solo permanecía a su lado, observándolo en silencio. Algo le decía que de cualquier forma se quedaría con su alma así que hace el trato. El ente entonces le deja ver su forma: una bella mujer de larga cabellera blanca quien lo toma del rostro y le da un suave beso en los labios sellando así el contrato.

Ahora, Cameron, tiene que morir para entregar su alma a la oscuridad y renacer con el poder prometido. En brazos de aquella mujer, el joven perece y poco tiempo después regresa al plano terrenal con el regalo prometido. Su piel es ahora tan pálida como la de ella y sus ojos se volvieron de color carmesí como la sangre.

“-Ahora tómala, haz realidad tu tan ansiada venganza, arranca la vida de aquellos que te lo quitaron todo”

Ante esas palabras expresadas por la demonio de ojos azules, el chico acude al encuentro del resto de su destino, encuentra en la cama a su madre con aquel hombre que decía amar a su padre y lo mató a sangre fría. Sorprendidos de verlo intentaron cubrirse pero fue demasiado tarde. Cameron ni siquiera los dejó hablar o escapar.

Primero tomó a Cedric del cuello y lo levantó de la cama con tanta facilidad que hasta él mismo se sorprendió.
Lo mantiene contra la pared sofocándolo, riendo a carcajadas ante los gritos desesperados de su madre que le exige que suelte al hombre. Usa la mano libre para perforarle el pecho de un solo golpe y la retrae al instante trayéndose consigo el corazón de aquel hombre. Deja caer al suelo el cuerpo sin vida de su tío y de un salto llega a la puerta de la habitación donde su madre ya pretendía escapar.

Todos los desprecios le vinieron a la mente en el momento que la toma por el cabello así que tira de ella con cierta violencia arrojándola a la cama. Por un momento piensa en romperle el cuello o arrancarle el corazón pero al final no puede. La deja tirada en la cama y sale de la habitación. Sin embargo, no planea dejarla escapar, usa sus nuevas habilidades y le prende fuego a la cama.

Unas llamas rojizas se apoderaron rápidamente del colchón, las cortinas y los muebles. Cierra entonces la puerta tras de sí y reparte las llamas por toda la casa hasta que llega al jardín, sitio en el que se encuentra la joven de blancos cabellos, sentada en el borde de la fuente, con la mirada vivaz y la sonrisa maliciosa, disfrutando el incendio.

El chico camina hasta la fuente y se sienta a su lado para disfrutar del espectáculo lleno de tintes rojizos y grises.

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