MgBigBoss is using SimilarWorlds.
Join SimilarWorlds today »
Tan sólo atrévete a dar un paso más novato...(Sólo rol)
About Me Notes
The Whiteboard is a place where people can send Gestures, Attributes, Images, Comments, and much more...
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
FeiSalat · F
-Luego de un encuentro con ciertas organizaciones de las cuales cortó toda conexión con ellas, la cazadora de demonios recorrió largos caminos por Japón, llevada a lugares gélidos, a otros muy calurosos. Con tan sólo 15 años se alejó lo suficiente de su antiguo hogar, aquél ahora en ruinas totales, abandonado a la merced de la naturaleza.

La ciudad de Uruma, una combinación de tres más pequeñas, tenía aquél lugar como sitio turístico, pero lo habían cerrado luego de encontrar a tres jóvenes asesinados allí en el plazo de una semana, ellos tenía diversas marcas de torturas en sus cuerpos tales como azotes y cortaduras, desde entonces la policía estuvo investigando el caso sin ningún resultado, no habían pruebas de lo sucedido y el castillo estaba totalmente abandonado.


Uruma, Prefectura de Okinawa, 20 de Noviembre.


Según rumores oídos entre la orden de cazadores con la que aún parecía tener conexión Fei a pesar de haberlos abandonado, supuestos seres oscuros habían invadido el castillo abandonado Katsuren siguiendo el modus operandi habitual consistente en despejar zonas óptimas para establecer sus bases y tomar víctimas, en la estructura se oían alaridos y llantos todas las noches. Aunque otros hechos daban a lugar actos de delincuencia allí, la albina suponía que no serían un gran problema. Distinto al pasado, estaba dispuesta a inmiscuirse en asuntos que no fueran exclusivamente paranormales, debido a que no había nada más peligroso para los humanidad que los humanos.

La ciudad parecía estar como normalmente sería, con excepción de la zona cercana al castillo, donde muchos comercios estaban cerrados. Los gritos nocturnos y los asesinatos habían asustado a algunos habitantes, entre ellos la gran mayoría eran adultos y ancianos, por otro lado, los adultos jóvenes no podían abandonar aquél trabajo obtenido, siendo el único con el que se sostenían, no se podían permitir dejarlo y no planeaban ser espantados ni por terroristas, a pesar de que la misma policía había puesto esa zona en estado de alerta.

Un par de semanas luego de los incidentes del castillo por fin llegó, con una larga gabardina negra que tapaba todo su cuerpo hasta sus rodillas, sus piernas bajaban hasta sus pies en desnudes hasta unas botas negras, además, lo más notorio en ella era una enorme caja de madera colgada de su espalda y su parche negro que cubría su ojo derecho, observaba todo con su único ojo visible de un color azul profundo y frío, Fei Salat, tan sólo una adolescente un tanto inexpresiva que poco comprendía del mundo moderno, había sido dejada calles atrás del castillo por el bus, ya que era una parada evadida por los conductores. Ella fue obligada a seguir su camino a pie, aquél día se podían apreciar algunas nubes en el cielo, no hacía calor, las brisas frescas acariciaban el rostro pálido de la chica, quien daba cortos y relajados pasos como si solamente paseara.
Entre más se aproximaba al lugar de los hechos, menos gente se cruzaba por la calle. Pasando unas tiras de cinta policial a tan sólo una cuadra de la zona, llegó al lugar, un sendero se dividía de la vereda y se dirigía hacia un terreno totalmente verde en el que se podía apreciar a lo lejos aquél monumento del pasado sobre la colina. Habían unas vallas que evitaban el paso de vehículos, por suerte ella no tenía auto, no podía conducir por su edad, ni sabía hacerlo.


Cuando dio el primer paso para adentrarse en su recorrido de investigación, un vendedor que en ese momento estaba cerrando su tienda por la falta de clientes, al verla, tan pequeña y sin parecer tener en cuenta los peligros, le gritó que se alejara del lugar. Fei, a pesar de oírlo, hizo caso omiso a aquello, y mientras caminaba bajaba la caja rectangular de su espalda para sostenerla sobre su hombro derecho desde la tira de cuero.
Su ojo azul no dejaba de mirar en todas las direcciones del frente mientras caminaba por el costado izquierdo del sendero próximo a los árboles, era consciente de que en caso de haber delincuentes y terroristas en el lugar, lo más posible es que se tuviera que cubrir rápidamente de disparos.-
 
Send Comment