Había permitido ese contacto en su mentón y no podía con la vergüenza porque la Vairant no sabía lidiar con ciertos halagos o comentarios, especialmente cuando la creían tierna.
— Tsk, boberías. Claro que no soy tierna, simplemente me ven... aburrida, Aideroth. Es mi cara de aburrimiento.
-Tuvo el atrevimiento de acercarse un poco a ella, los tres dedos de en medio se colocaron bajo la mandíbula de ella y le alza un poco el rostro.-
Normalmente, tanto tu como Azroth suelen verse algo "animados", hasta pueden dar miedo, pero con esa expresión luces tierna, verte calmada es tierno en cierto modo.
— ¿Tierna? — inmediatamente se agarró la cara, como si verse tierna le fuera a cambiar el rostro notoriamente. ¿Cómo es que ser seria era verse tierna? — Ah...¿Gracias? — ni siquiera sabía si eso era correcto [?]
