Lo se lo se... pero ahora todo esta bien, asi que mejor no hablemos de eso, si? -Sabia que Naos no iba a priorizar la vida del bebe sino la suya, asi que se alegraba de que todo hubiera salido bien a pesar de la noche larga- Cuidate, si? -le dice a modo de despedida, dejandole irse para cerrar los ojos, tomaria al menos una pequeña siesta en lo que el lobo iba y venia con su jugo-

Lo sé, pero... Recuerda que no iba a anteponer su vida por la tuya. -Aunque el embarazo había sido estable y sin mayores contratiempos, si en algún momento la vida de su pareja se viera amenazada, no dudaría en sacrificar al cachorro.
Aunque ahora todo estaba bien, le dio un beso en su mano.- No tardo. -Salió rumbo al pasillo, a una máquina expendedora para comprar dos jugos, él también necesitaba azúcar en el sistema.-

Al menos no hubo que interrumpir el embarazo, eso no hubiera sido bueno -comenta sonriendole intentando relajarse, la verdad es que estaba muerto de sueño, pero no queria dormir aun- Me harias un enorme favor si me trajeras un jugo de manzana -responde riendo, la comida del hospital si que estaba mala, pero podria estar peor- Te esperaré aqui

Te dije que las faces de la luna afectan mucho. Pero al menos se calmó ya. -Con su mano libre, peinó los cabellos rojizos del incubo, suspirando de nuevo, el color en su piel y su semblante estaban un poco mejor.- ¿Quieres que te traiga un jugo? La comida de aquí te hará vomitar de lo fea que está.

Voy a estar bien -le asegura, por lo menos lo mas malo había pasado y ahora el demonio se encontraba estable- Lo siento por eso, supongo que fue por la luna llena, este bebé va a ser un poco trabajoso hehe

¿Y dejarte solo en esa cama incómoda? Claro que no. -Se acercó a él para tomar su mano y dejar un tierno beso en su frente, mirándolo orgulloso y con alivio.- Me asustaste mucho por un momento.

Gracias por pasar la noche conmigo, pero deberias irte a dormir -le dice tomando su mano y sonriendo, el lobo en verdad estaba haciendo un genial trabajo-

Dijeron que todavía no es tiempo, pero estás muy cerca de parir. -Sacudió la cabeza un poco, para despavilar el sueño. Ambos estuvieron despiertos toda la noche hasta que los dolores se habían calmado.-