- Se habia despertado muy temprano ese dia. Avanzo un poco el trabajo de la biblioteca subterranea y despues se dio un baño. Aunque no se vistio con su llamativa armadura si llevo la espada de la cueva que estaba junto al caldero. Espero en el comedor sentado, moviendo impaciente un pie. Si bien no se consideraba discreto con su impaciencia, Lysander si que le ganaba, pues caminaba como leon enjaulado de un lado a otro. -
- Le atrapo por facilidad, sus manos sosteniendole el trasero. Se sento en la cama matrimonial de piedra, llena de cobijas que se esforzaban en hacer la dura superficie plana algo mas comoda. Ahi, cambio una mano a su rostro, deslizando el pulgar por la almohadilla de su labio inferior, mirando fascinado. -
