Acariciaba esa espalda de la rubia pasando sus palmas por esa piel, le masajeba con caricias, sonreía ladina en esa cercania con su Blondie.

— ¿Soy insoportable, mucho? ~

Coqueta juntaba su frente en la de ella, se sentía muy atraída por su compañera, su partner in crimen.

— ¿Y si... te digo que quiero verte con un traje de látex? Del color que quieras... ¿Aceptarías?

Una de sus manos se suelta y va en caricia a la mejilla de la contraria apartando mechones rubios detrás de su oreja continúando con las caricias a su piel en el rostro. Su tono de voz era coqueto y se mantenía entre murmuraciones audibles.

— ¡Hahahaha! Mujer, eres insoportable pero eres por lejos, la persona mas chistosa que conozco.

Seguía acariciándole el cabello, con un leve movimiento de su cabeza. ¿Qué haría con ella? No tenía otra opción que seguir sus disparatados planes. Si, le había creído.

— Okay...

Frunce su ceño, aquella rubia le hizo relamerse los labios, no iba a caer en su juego, por otra lado la apretó a su cuerpo por completo.

— Creo que las dos orejas que tienes escucharon perfectamente...

Por otro lado, el cambiar o disfrazarse si lo veía perfectamente útil, más por las cosas que hacía y si Rose sería su cómplice obligada, estaría más que suficiente para sus trabajos sucios.

— ¿Entonces podemos disfrazarnos para ciertos trabajos? Ya sabes... Que te pongas de sadomasoquista y yo de tu dominante ~

Esperen, eso no era pero quería bromearle un rato. La pelirroja ríe divertida sin quitar sus ojos de ella, le gustaba las caricias a su cabello por parte de la rubia, "que nunca terminará por favor" pensaba.

— El maquillaje resalta la belleza. Si eso te parece inútil, también sirve para verte como una persona totalmente diferente.

Rose ya se encuentra acomodándo esos cabellos rojizos, peinandolos hacia atrás con sus dedos. Es justo en ese instante que se ríe por lo alto, sin querer le jala un mechón. (?)

— Disculpa, ¿me acabas de dar la razón? ~ No escuché bien...

— Y boca sucia... ¿Para que coño voy a querer maquillarme? (?)

Exclamó la pelirroja riendo suave ante esas caricias de la rubia, Juliana cerro el pico y se dedicó a besar esos labios de Rose. Esa mujer si que le derretía molesta, calmada, de la forma en que ella estuviera.

— Te queda más lindo a ti el maquillaje me parece...

Susurra en sus labios aún manteniendo esa sonrisa coqueta.

— Está bien... Seré más cuidadosa porque tienes... R-r....Hmg! Ra....razón... Diablos... Que difícil (?)

Por cómo la estaba mirando, Rose bajó la guardia. Hasta se ríe detallando el estado de su piel y cómo Juliana parecía querer seducirla luciendo así. En verdad, era una mujer especial.

— Y yo te creo, pero de todas formas tengo que hacer respetar mis cosas, aunque puedas comprar nuevas.

Su diestra deja una caricia suave a la frente de la pelirroja, apartando con cuidado un mechón de cabello.

— Eres linda. Podría darte lecciones de maquillaje, si quieres.

— Deberías ser limpiadora.

Admitía cruzándose de brazos al estar sucia con ese maquillaje de muerto, la idea se le fue porque se distrajo al tener en cuenta esa característica de Rose dónde era sarcástica en su respuesta sobre los muertos maquillándose (?).

— Ahhh... Rose ...

Le mira fastidiada... Pero por otro lado desliza su vista en ella. Ladina con una sonrisa y una mirada más interesada toma por las caderas a esa mujer.

— Sabes muy bien que el dinero no será problema conmigo... Te prometí dinero, diversión y básicamente lo que desees...

El rostro de la pelirroja pese al desastre en el que se encontraba estaba cercano y coqueto al de la rubia.

— Siempre cumplo lo que digo.

— Espera, ¿qué te da asco? Hablas como si el muerto usara sus manos huesudas para maquillarse a sí mismo.

Ríe, negando con la cabeza incapaz de ocultar su decepción. Juliana era una de esas señoritas frágiles después de todo. Y Rose, siempre muy cerca de la muerte, sin miedo ni asco. En varios sentidos.

— Costoso. Ese maquillaje no saldrá de mi sueldo, lo vas a pagar tú sola.

La cara fue un poema, con una expresión de verdadero asco y sus labios con mueca hacia abajo hace que la pelirroja se levanté de dónde estaba sentada.

— ¿Que mierda Rose? Que asco... Me gusta matar pero el tema de los cadáveres se los dejo a los limpiadores, iack.

Era algo contradictorio, podía matar y llenarse de sangre pero tocar muertos luego de más de tres días con esa piel fría le daban ganas de vomitar.

— Ah maldita sea... Que asquerosa eres rubia

Se limpiaba y sacudía ese maquillaje con repulsión, bien niña ella (?).

— ¿Cuánto cuesta? Deja de llorar, te lo repongo en una de las misiones que nos toque.

La suelta arrugando el entrecejo con fastidio, y se cruza de brazos totalmente indignada. Era muy recelosa con sus cosas, no confiaba en las manos poco delicadas de Juliana en algunos aspectos. (?)

— Es maquillaje para cadáveres. Eso que tienes ahí, es un tono neutralizador de zonas en descomposición.

Se agacha mirándola a la cara. Esa que ahora quiere golpear.

— No tienes idea de lo costoso que es ese maquillaje.