- Como siempre era de muy pocas palabras pero sumamente sincero, a veces demaciado aun cuando nunca deseaba ser ofensivo o algo por el estilo. Pese a todo era capaz de notar lo contrariado que estaba su amigo, aunque, estaba seguro que luego del infarto Uenoyama se tomaria todo demaciado bien, era sin duda de ese tipo de personas -
El estara feliz por ustedes y no te preocupes, no soy quien para decir algo como eso..
- Le dedico una sonrisa que esperaba que fuese conciliadora, quiza era por que ambos hombres eran mayores, pero, era mucho mas facil con el tiempo hablar con ellos. Con el azabache tenia muchos problemas para que entendiese lo que deseaba decir -
Respondió a lo dicho por el menor una vez que se tranquilizo. Solo había sido una respuesta vaga ya que en el fondo una parte de él pensaba lo mismo, solo que no quería decirlo en voz alta para que no se cumpliera. Y además...Uecchi no era tan malo a final de cuentas.
–Se que como líder debo dar un buen ejemplo a mi banda, me portaré bien...ambos lo haremos.–
Hizo una pequeña reverencia y junto sus manos palma contra palma a modo de suplica, estaba a punto de pedirle al menor un pequeño favor.
–Así que con esta promesa en pie te pido de favor que no le digas nada a Uecchi. Al menos... me gustaría podérselo decir en persona.–
Es lo único que podía pedir porque sabía por experiencia propia en otras situaciones que el enterarse de algo por otros medios al original podía ser incluso peor y más complicado.
- Bueno, eso le pasaba por adelantarse a los ensayos, habia llegado antes con la intencion de tararear un poco a solas la melodia que no dejaba su cabeza, pero claro, nada le habia preparado para toparse con algo como eso.
No era que no se lo esperase, despues de todo siempre habia notado una extraña tension entre esos dos, en realidad parecia que el unico que no la notaba era Uenoyama.
No pudo evitar pese a todo sentirse mal al ver asi de avergonzado al rubio, avergonzandose tambien el por haber interrumpido aquel momento -
Etto.. yo, creo que.. a.. Uenoyama le dara un infarto
- De verdad eso era lo mejor que podia decir?, quiso abofetearse por no poder decirles que estaba todo bien y que tenian su apoyo. Pero bueno, supuso que se entendia -
Luego de que ambos comenzaran una relación solo quedaba decírselo a los chicos, Haruki sabía que no sería un problema pero mientras se preparaban para anunciarlo aprovechaban cualquier momento a solas para estar juntos. Esta vez, ya que habían llegado más temprano que sus compañeros al estudio el mayor no se negó a las demostraciones de afecto de su pareja, esto hasta que la voz del pelinaranja lo perturbo haciéndole retroceder de forma inmediata.
–¡Mafuyu! Esto... ¡No es un secreto! Eh...–
Sus mejillas estaban encendidas mientras trataba de explicarse ante el menor de la forma más clara posible.
