Child of the Hunt
About Me About Me
Nombre: Fei Salat.
Edad: 16 años.
Apariencia:
Una joven de baja estatura, tal vez 1.50mts de alto. Albina de "ojo" azul, con una piel suave y blanca, sólo superada por su cabello nevado.
Arsenal:
Un fusil de francotirador pesado Kar98K de cerrojo, con un cargador para sólo dos balas y con un adaptador de mira intercambiable, un carcaj pequeño para su munición, aunque solía llevar una o dos granadas caseras allí. Finalmente, ocupa un cuchillo de combate básico.
Para comunicarse y buscar información utiliza sólo un smartphone.
Mentalidad:
A pesar de su frialdad superficial, ella siempre presentó un corazón frágil desde su niñez, pero con el tiempo se llenó de dolor y desconfianza ante todos los seres pensantes, el único temor que presentaba todo el tiempo era el de la mentira.
No conoce algunas cosas de la sociedad humana, puesto que fue criada en confinamiento con la secta y los cazadores.
Nunca se le dio muy bien socializar.
Habilidades:
El entrenamiento con armas de fuego la volvió una experta tiradora. Sin embargo ya poseía conocimientos previos cuando le instruyeron en todas las artimañas que usó para el secuestro y asesinato. Lo que le resultó en buenos reflejos, velocidad y precisión.
Posee conocimientos de tecnología avanzada (militar) luego de haber pasado una temporada bajo contrato para el ejército.
Visión: Predice(1); Señala (2).
Juicio: Discierne (1).
Misericordia: Señala (1); Esconde (2).
Venganza: Atraviesa (1), Sigue (2).
Historia:
Durante años los humanos han estado en la tierra ignorando la existencia de seres oscuros, tales como los demonios, aquellos temidos entes infernales de la biblia. Sus artimañas han sido resultantes de innumerables crímenes contra la humanidad, secuestros, sacrificios de carne en sectas y rituales malditos, llegando al borde de la decencia de sus seguidores para convertirlos en simples esclavos o cascarones sin vida.
Fei fue una de esas víctimas, su familia entera se conformaba por sectarios desde antes de su nacimiento. La matrona, su madre, vivió su vida adorando a los caídos, venerando el poder encadenado en los artilugios que utilizaban para sus rituales sangrientos.
Nacida de la unión entre la matrona Freia Duriel y el demonio Salat, Devorador de Corazones, la mirada de la joven estuvo muerta desde que abrió los ojos. Sus primeros años de vida en la aldea japonesa, cercana al monte Füji fueron como los de una mascota llena de cariño, quien era falsamente amada por sus padres, criada exclusivamente para adorar a los viles seres que asomaban sus garras entre la oscuridad para tomar las almas infieles a sus ideales.
Un día, unos cazadores asaltaron la guarida del devorador, trataron de rechazar al demonio, quien se protegía con sus artes de ultratumba, su mirada era la llama que hacía arder el corazón de los mortales, era una mirada que incluso asustaba a Fei, quien al no poderse enfrentar a las fuerzas de los cazadores, fue no más que un simple escudo, una carnada, una distracción, un rehén.
Fueron levados contra armas, hechizos, cantos llenos de santidad.
Freia se había quedado a retrasar a los cazadores por orden de Salat, quien corrió seguido por Fei hacia el bosque.
La niña y su padre corrieron hacia un escondrijo lejano a aquellas tierras que una vez fueron pobladas por el caos y el crimen del mundo.
Cuando la albina por fin entró al refugio, la esperaba la mirada siniestra de su creador, los ojos de Salat eran llamas repletas de odio y oscuridad, en ese momento el hedor que ella siempre había sentido, el olor que pensaba que era de sangre putrefacta y seca ahora se revelaba sobre el demonio, sobre su poder desatado por la ira.
Ratos después fueron encontrados y Salat fue atravesado por innumerables balas y hechizos hasta su muerte, aquellos ejecutores se apiadaron de la albina, quien yacía en el suelo retorciéndose de dolor sobre un charco de sangre, sus ojos azules eran un mar que derrochaba gotas de sufrimiento, hasta llegar a la inconsciencia.
Pocos días después de eso tuvo que empezar a usar parche, y a pesar de todo lo pasado, el dolor aún latía dentro de su ojo derecho en todo momento.
Aquella noche trágica de hace 5 años fue el comienzo de la verdadera Fei, quien fue educada para amar a los demonios había sembrado sobre si misma las semillas del desprecio hacia esa raza.
Los cazadores no fueron suaves en su tratamiento, ella no dejaba de ser hija de un demonio. La disciplinaron, pero ella conocía sus verdaderas intenciones, no eran distintos a Salat, sacrificando a los demás para conseguir sus objetivos, abusando del poder y la fuerza.
Con el tiempo se acostumbró a ello, su frágil corazón estaba congelado por todo el resentimiento y sed de venganza, su indiferencia era perteneciente a los humanos y su desprecio a los demonios que cazaba.
Con el tiempo se distanció de su camino con los hombres que la habían salvado por cuestiones de confianza, vagó por todo japón en busca de seres oscuros, conocida como la Cazadora de Cuernos, su prioridad era la caza de los demonios que tanto odiaba.
Más adelante, por encuentros que no llegarían a culminar como ella habría previsto, acabó en manos de cierta organización, donde fue torturada y obligada a hablar acerca de ella misma y de otras personas antes de ser soltada de nuevo por las calles de Alemania esta vez, donde seguiría su trayecto sin rumbo alguno.
Reglas:
-No se aceptan comentarios que no sean parte de una escena de rol.
-Escenas sólo por chat, pueden haber excepciones por mensajes.
-No se permite rol sexual.
-Éste personaje puede ser algo duro, no lo tomen de forma personal.
-Referido al rol en chat, por favor, hagamos nuestro tiempo para tener una trama continua con respuestas rápidas. En cuanto a los mensajes, se pueden tardar lo que deseen, siempre avisando por inactividad.
-No hay límite de renglones/líneas.
-No se permite dejar una escena a medias, es preferente un final brusco y forzado.
-Diviértanse, espero que disfruten de este personaje.