— Yo no estoy molesta con Zuka.— Le hizo saber, posando al peluche en su vientre, donde el mismo se movía caminando sobre ella pues no quería que lo soltara.

Su sobrina estaba feliz y no lloraba eso era bueno para el, asistiendo a sus palabras mientras veía como movía las extremidades.

me alegro que te haya gustado cotton, recuerda que debes perdonar a zuka

𝑬staba. No, no lo estaba; se encontraba feliz pues su peluche estaba como nuevo a pesar que paso por una experiencia traumática. — Hola abuelito Escorpio.— Lo saludo girando su rostro para regalarle una sonrisa afable y tranquila, moviendo su peluche entre sus manos hasta que el mismo comenzó a mover sus extremidades.

Se acomodo al lado de su nieta viendo cómo el peluche quedó como nuevo