Cɪᴇɴᴛɪ́ғɪᴄᴀ┊Gᴏᴋᴜ ♡┊Cᴀɴᴏɴ┊₁₆
About Me About Me NotesThe Whiteboard is a place where people can send Gestures, Attributes, Images, Comments, and much more...
This user is not accepting Whiteboard comments.
1-10 of 30
SG1581310 · 26-30, M
[ Necesito que leas tu mensajería. ]
SonGoku1568620 · M
SonGoku1568620 thinks you are Awesome.
SW-User
[code]—¿Mi collar? Mi collar es para poder mantener en control mi poder, duele tenerlo, pero mi padre dice que es por mi bien, aunque eso sea una especie de castigo para mí. — Daba una respuesta que podía sonar de una persona que en toda su vida ha sido controlada, a pesar de su gran poder y fuerza, probablemente aquellas palabras cambien un poco la perspectiva de la situación tanto de Bulma como Jaco.
Por supuesto sintió como la joven mujer le agarró del brazo y le atrajo este hacia ella, sintiendo aquellos pechos, claro, ella al parecer actuaba queriendo provocar, pero él no entendía mucho. ¿Tal vez era un saludo? ¿Una forma de comunicarse? Broly no tenía ni la más absoluta idea de ese tipo de gestos y del actuar de aquella mujer, aunque parecía ser una buena persona que quería ayudarle tanto a él como su padre. —Mi padre está prácticamente al otro lado de este planeta, yo vine aquí a entrenar, pero se esta haciendo tarde… Cuando anochece es cuando más hostil se vuelve el ambiente de este planeta, puede ser peligroso para ustedes pasearse por este lugar. Hay unas cavernas por ahí donde no viven bestias peligrosas, tal vez sea el mejor sitio para refugiarse, ya mañana los llevaré con mi padre. — Daba una clara sugerencia a ambos individuos recién llegados a ese mundo, aquel par de personas que son los primeros en conocer, a parte de su padre y uno que otro monstruo de ese mundo.
De pronto su contraría le dio un chocolate y él lo probó, le parecía extraño, nunca había visto algo así, tras comer simplemente sintió un sabor que nunca en su vida había sentido, algo muy delicioso. Se lo comió al instante, no lo expresó con palabras pero le gusto demasiado.[/code]
Por supuesto sintió como la joven mujer le agarró del brazo y le atrajo este hacia ella, sintiendo aquellos pechos, claro, ella al parecer actuaba queriendo provocar, pero él no entendía mucho. ¿Tal vez era un saludo? ¿Una forma de comunicarse? Broly no tenía ni la más absoluta idea de ese tipo de gestos y del actuar de aquella mujer, aunque parecía ser una buena persona que quería ayudarle tanto a él como su padre. —Mi padre está prácticamente al otro lado de este planeta, yo vine aquí a entrenar, pero se esta haciendo tarde… Cuando anochece es cuando más hostil se vuelve el ambiente de este planeta, puede ser peligroso para ustedes pasearse por este lugar. Hay unas cavernas por ahí donde no viven bestias peligrosas, tal vez sea el mejor sitio para refugiarse, ya mañana los llevaré con mi padre. — Daba una clara sugerencia a ambos individuos recién llegados a ese mundo, aquel par de personas que son los primeros en conocer, a parte de su padre y uno que otro monstruo de ese mundo.
De pronto su contraría le dio un chocolate y él lo probó, le parecía extraño, nunca había visto algo así, tras comer simplemente sintió un sabor que nunca en su vida había sentido, algo muy delicioso. Se lo comió al instante, no lo expresó con palabras pero le gusto demasiado.[/code]
SW-User
[code]Vio a la mujer y a su acompañante, la fémina tenía una apariencia no muy distinta a él y su padre, en el sentido de que tanto humanos y saiyans comparten por decirlo de cierta manera, una forma humana, claro él no lo asociaba así pero lo veía por la piel, brazos, piernas, en cuanto a Jaco, él claramente era diferente, aunque no lo veía como una criatura hostil a ni a él ni a la mujer. Pero a aquella joven llamada Bulma si la veía diferente, y es que por ser mujer tenía cosas en su cuerpo que para él eran extrañas, a lo que observo a la joven, pero lo hacía con curiosidad porque no la comprendía del todo bien, normal, nunca en su vida había visto una mujer de su especie, menos de otras. Bueno, tal vez cuando muy niño pero ya ni lo recuerda, después de todo han pasado demasiados años. Así que en cuanto a la exhibición de ella en cuanto a sus ropas, era algo que no entendía.
Luego la mujer tomó la palabra a lo que decidió responder. —Sí, soy un saiyayin. — Pensativo aquel saiyan de cabellos oscuros coloco su mano sosteniendo su propio mentón. —¿Señal de auxilio? No sé que pudo ser... He vivido toda mi vida aquí con mi padre. — Claro, él solo sabía de pelear, sobrevivir, cazar, desconocía la tecnología y su uso, claro, había visto naves, la de Bulma y Jaco, como también en la que tiempo atrás con su padre terminaron en ese mundo, pero nada más. —Tal vez mi padre sepa algo. —
—Este lugar es peligroso, deberían andar con cuidado por aquí. — Comentaba cuando de pronto la joven interrumpió su espacio personal tocando su collar inhibidor el cual en cierta forma servía para controlar su propio poder, algo que su padre usaba en él en ocasiones, claro está que como un castigo ya que le producía dolor a la hora que lo activaba. —No... ¿Qué estás haciendo? Mi padre me dice que no debo quitarme esto. — Expresa al dar un paso hacia atrás, apartándose de la joven quién se había acercado y coloco sus manos cerca del collar.[/code]
Luego la mujer tomó la palabra a lo que decidió responder. —Sí, soy un saiyayin. — Pensativo aquel saiyan de cabellos oscuros coloco su mano sosteniendo su propio mentón. —¿Señal de auxilio? No sé que pudo ser... He vivido toda mi vida aquí con mi padre. — Claro, él solo sabía de pelear, sobrevivir, cazar, desconocía la tecnología y su uso, claro, había visto naves, la de Bulma y Jaco, como también en la que tiempo atrás con su padre terminaron en ese mundo, pero nada más. —Tal vez mi padre sepa algo. —
—Este lugar es peligroso, deberían andar con cuidado por aquí. — Comentaba cuando de pronto la joven interrumpió su espacio personal tocando su collar inhibidor el cual en cierta forma servía para controlar su propio poder, algo que su padre usaba en él en ocasiones, claro está que como un castigo ya que le producía dolor a la hora que lo activaba. —No... ¿Qué estás haciendo? Mi padre me dice que no debo quitarme esto. — Expresa al dar un paso hacia atrás, apartándose de la joven quién se había acercado y coloco sus manos cerca del collar.[/code]
SW-User
[code]
Aquel planeta hostil, árido en algunos sitios ya que había estanques y lagos en otros lugares, estaba lleno de monstruos, el lugar era prácticamente su hogar; desde muy temprana edad el saiyayin termino en ese mundo junto a su padre, donde este le entreno con tal de que Broly aumentara anormalmente su poder debido al potencial que tenía, por lo cual se le considera como un mutante entre su especie. El destino a veces puede ser una cosa, pero también otra; probablemente en otra realidad por circunstancias él tenía que ser encontrado por tal individuo, lo que le haría salir de ese mundo y hacerse conocer, pero esta vez sería un caso algo diferente.
Broly se había hecho muy poderoso con el pasar de los años, pero aún faltaba mucho poder que liberar. ¿Lo podría conseguir? Tanto él como su padre, Paragus, sabían que había alcanzado un gran nivel de pelea, tal vez lo suficiente para llevar a cabo la tan ansiada venganza de su padre.
De vez en cuando Broly se enfrentaba a bestias hostiles que habitan en ese planeta conocido como Vampa. Con otras criaturas había conseguido forjar cierta relación de amistad, manteniendo una buena convivencia. Para aquel hombre el lugar era perfecto sea para entrenar individualmente y mantener cierta tranquilidad. Después de todo a pesar de su gran poder, él tiene una naturaleza pacifica, tranquila, incluso podría hasta decirse que es alguien de buen corazón.
Un día cualquiera Broly volaba por aquel mundo cuando de pura casualidad, tal vez el destino, vio a una joven mujer humana acompañada de un individuo con vestimentas inusuales ya que pertenece a la patrulla galáctica, ambos eran perseguidos por unos horribles monstruos con forma de araña.
Lo que destacaba en él era su fornido torso y esa cicatriz tan simbólica, así como la piel de bestia que lleva atada a su cintura, debajo llevaba una ropa morada apegada a sus piernas, así como las botas que portaba, una vestimenta muy a los trajes que usaban la casi extinta raza saiyayin, a excepción que en su caso no portaba la armadura.
Debido al peligro no dudo en desplazarse a gran velocidad y golpear a esas arañas, las cuales mando a volar, de esa forma salvó a la joven terrícola y a su acompañante, luego de eso volteó a verles y pregunto en un tono calmado.
—¿Se encuentran bien?
[/code]Broly se había hecho muy poderoso con el pasar de los años, pero aún faltaba mucho poder que liberar. ¿Lo podría conseguir? Tanto él como su padre, Paragus, sabían que había alcanzado un gran nivel de pelea, tal vez lo suficiente para llevar a cabo la tan ansiada venganza de su padre.
De vez en cuando Broly se enfrentaba a bestias hostiles que habitan en ese planeta conocido como Vampa. Con otras criaturas había conseguido forjar cierta relación de amistad, manteniendo una buena convivencia. Para aquel hombre el lugar era perfecto sea para entrenar individualmente y mantener cierta tranquilidad. Después de todo a pesar de su gran poder, él tiene una naturaleza pacifica, tranquila, incluso podría hasta decirse que es alguien de buen corazón.
Un día cualquiera Broly volaba por aquel mundo cuando de pura casualidad, tal vez el destino, vio a una joven mujer humana acompañada de un individuo con vestimentas inusuales ya que pertenece a la patrulla galáctica, ambos eran perseguidos por unos horribles monstruos con forma de araña.
Lo que destacaba en él era su fornido torso y esa cicatriz tan simbólica, así como la piel de bestia que lleva atada a su cintura, debajo llevaba una ropa morada apegada a sus piernas, así como las botas que portaba, una vestimenta muy a los trajes que usaban la casi extinta raza saiyayin, a excepción que en su caso no portaba la armadura.
Debido al peligro no dudo en desplazarse a gran velocidad y golpear a esas arañas, las cuales mando a volar, de esa forma salvó a la joven terrícola y a su acompañante, luego de eso volteó a verles y pregunto en un tono calmado.
—¿Se encuentran bien?
BG1518591 · M
Esa voz exaspera al Kaio. No había, por ahora, más que hacer que sujetarse con el antebrazo de aquel borde de la escotada prenda mientras la mujer anunciaba rebelde que abordaría el motorizado vehículo. Entumecía cada parte de su cuerpo frente al dolor de esa especie de anticuerpos que atacaban sus propias defensas, cual respuesta autoinmune entorpecida. — Lo suficientemente cómodo para tu desdicha, humana. — Seguía con esa soberbia y renegó a tener que dejar que llegue a esa base donde él solía descansar, pero era el mejor punto para mantenerla y lego hacerle sentir el verdadero terror, después de todo parecía que ella desconocía de la existencia del otro "el" y su poción no haría efecto en ese otro cuerpo. Sonrió, no podía fallar en sus cálculos, era impensable que una simple mortal supere inteligencia, la pondría en jaque porque después de todo, a los enemigos se les debe tener cerca.
La mujer se alistó y él igual, tan pronto como ella aceleró, lo sostuvo con esa fuerza apoyando su antebrazo y mano en esa tela, las piernas levemente flexionadas contra lo primero que pudiesen apoyarse sobre el sobresaliente y erógeno en medio de su aureola. El largo de su disminuido cuerpo lograba acaparar hasta ese punto en el pecho de la peliazul de tan decoroso traje. Lo hizo inconsciente y en verdad poco importaba dónde ponía o no sus pies, puesto que al final ella le ubicó en esa parte para transportarlo pese a su tecnología. — No creas que tendrás tan fácil mi piedad solo porque te sientes tan jovial. —
Burló con sus palabras, menos desafiantes aunque no dejaban de ser verdad. Añadió un último recordatorio , solamente para que tenga claro que con él no podía dejarse pasar absolutamente nada. — La única diferencia entre la versión de la Bulma de futuro y tu es que ella buscó más rápido su final, piénsalo dos veces si deseas llegar a esa edad. —
La mujer se alistó y él igual, tan pronto como ella aceleró, lo sostuvo con esa fuerza apoyando su antebrazo y mano en esa tela, las piernas levemente flexionadas contra lo primero que pudiesen apoyarse sobre el sobresaliente y erógeno en medio de su aureola. El largo de su disminuido cuerpo lograba acaparar hasta ese punto en el pecho de la peliazul de tan decoroso traje. Lo hizo inconsciente y en verdad poco importaba dónde ponía o no sus pies, puesto que al final ella le ubicó en esa parte para transportarlo pese a su tecnología. — No creas que tendrás tan fácil mi piedad solo porque te sientes tan jovial. —
Burló con sus palabras, menos desafiantes aunque no dejaban de ser verdad. Añadió un último recordatorio , solamente para que tenga claro que con él no podía dejarse pasar absolutamente nada. — La única diferencia entre la versión de la Bulma de futuro y tu es que ella buscó más rápido su final, piénsalo dos veces si deseas llegar a esa edad. —
H1581295 · M
[code]Una gota de sudor se deslizó por la frente del mercenario, estaba en problemas, era claro, pero el principal problema era la presencia de la escandalosa mujer.
De pronto, la niña se hizo diminuta, hecho que sorprendió a Hit, pese a ello, no demostró su sorpresa por hábito.
─ Niña, he pisado una mina, estoy cien porciento seguro de ello. Si me hiciera pequeño, perdería peso y la mina estallaría ─dijo con seguridad.─ Déjame pensar en una solución...
«No queda de otra, tendré que hacer el salto en el tiempo. Será desventajoso si alguien estuviera grabando mi situación. No queda de otra...»
─ ¡Niña! Cierra los ojos o terminarás vomitando ─ ordenó el hombre.
Inmediatamente inhaló profundo, cerró los párpados y justo al momento de exhalar, una cadena de explosiones se desencadenaron, una tras otra, el ruido fue tremendo, a tal grado de provocar alaridos de terror en los habitantes de la ciudad a pesar de estar a cierta distancia. Pareció un apocalipsis de proporciones bíblicas.
─ Ya puedes abrir los ojos ─dijo el hombre.
Llevaba a Bulma en la palma derecha, había hecho lo posible para que saliera ilesa. La mirada del mercenario era serena, aunque también se podía notar cierta preocupación, no solo por haber tenido que usar su técnica principal, sino, que había fallado en su trabajo. Tenía que solucionarlo lo antes posible, antes de que los rumores de su fracaso se extendieran por la galaxia.[/code]
De pronto, la niña se hizo diminuta, hecho que sorprendió a Hit, pese a ello, no demostró su sorpresa por hábito.
─ Niña, he pisado una mina, estoy cien porciento seguro de ello. Si me hiciera pequeño, perdería peso y la mina estallaría ─dijo con seguridad.─ Déjame pensar en una solución...
«No queda de otra, tendré que hacer el salto en el tiempo. Será desventajoso si alguien estuviera grabando mi situación. No queda de otra...»
─ ¡Niña! Cierra los ojos o terminarás vomitando ─ ordenó el hombre.
Inmediatamente inhaló profundo, cerró los párpados y justo al momento de exhalar, una cadena de explosiones se desencadenaron, una tras otra, el ruido fue tremendo, a tal grado de provocar alaridos de terror en los habitantes de la ciudad a pesar de estar a cierta distancia. Pareció un apocalipsis de proporciones bíblicas.
Varios kilómetros lejos de la zona de explosiones
─ Ya puedes abrir los ojos ─dijo el hombre.
Llevaba a Bulma en la palma derecha, había hecho lo posible para que saliera ilesa. La mirada del mercenario era serena, aunque también se podía notar cierta preocupación, no solo por haber tenido que usar su técnica principal, sino, que había fallado en su trabajo. Tenía que solucionarlo lo antes posible, antes de que los rumores de su fracaso se extendieran por la galaxia.[/code]
SG1581310 · 26-30, M
SG1581310 thinks you are Adventurous.
SG1581310 · 26-30, M
[ Me encontré esto por ahí [?] ]
BG1518591 · M
— Al menos eres útil como una sirviente, humana. — El primero de sus palabreos tan pronto tenía sobre su mano aquella sopa instantánea. Renegaba consumir las miserias de la alimentación de esa especie; sin embargo y pese a haber diezmado ese cuerpo, esa misma anatomía exigía nutrientes y poder hidratarse frente a esa fiebre que lo invade. Pero mientras deliraba, bien sea por la temperatura ascendente corporal, había descuidado lo suficiente a la peliaguamarina como para que esta pusiese un dispositivo en su muñeca que redujo su talla lo suficiente como para quedar del tamaño de un roedor, o incluso algo más pequeño. Apretó sus dientes, claramente molesto, el cabello parecía tratar de levantarse y trasformar su color pero era un intento en vano y superficial solamente guiado por sus emociones de ira. —¡Maldita! ¿Por quién me tomas? — Estaba decidido, iba a acabar con ella cuando sus fuerzas se hayan recuperado por completo, pero algo en las palabras de ella llamó su atención: ¿Zen-o-sama? Parecía que ella conocía o tenía información sobre la omnipresencia misma a la cual dioses y ángeles veneraban, eso, sin duda alguna, parecía ser un obstáculo para él y una clara muestra de que tenía que lidiar con prontitud con esa mujer.
Miró de reojo, evidentemente molesto, pero era claro que el juego cambiaba de táctica y estrategia a partir de ahora, hasta saber con seguridad si ella realmente tenía contacto con el dios de todo y poder encargarse él directamente de esa situación. Entonces accedió, para la resistencia y los Saiyans que habían viajado anteriormente en el tiempo no era un secreto la ubicación de él, y quizá era lo mejor, llevarla directamente a su cabaña, posiblemente era cuestión de días para que su parte que había deseado la inmortalidad le ayudase. Sonrió de medio labio, oculto en aquel corsé del cual se sostiene con uno de sus brazos, mientras la mano libre la empleaba para llevar el recipiente de esa sopa y beber tragos largos de esta junto a sus fideos. — Solamente dirígete al norte. En el bosque hay una cabaña, la única construcción en medio de ese lugar, visible desde el aire. — renegó, pero era la mejor alternativa, tener a su enemiga lo suficientemente cerca, solamente debería tolerar tantas palabras carentes de sentido y en ese fastidioso y egocéntrico tono de voz con el que la científica hablaba.
Miró de reojo, evidentemente molesto, pero era claro que el juego cambiaba de táctica y estrategia a partir de ahora, hasta saber con seguridad si ella realmente tenía contacto con el dios de todo y poder encargarse él directamente de esa situación. Entonces accedió, para la resistencia y los Saiyans que habían viajado anteriormente en el tiempo no era un secreto la ubicación de él, y quizá era lo mejor, llevarla directamente a su cabaña, posiblemente era cuestión de días para que su parte que había deseado la inmortalidad le ayudase. Sonrió de medio labio, oculto en aquel corsé del cual se sostiene con uno de sus brazos, mientras la mano libre la empleaba para llevar el recipiente de esa sopa y beber tragos largos de esta junto a sus fideos. — Solamente dirígete al norte. En el bosque hay una cabaña, la única construcción en medio de ese lugar, visible desde el aire. — renegó, pero era la mejor alternativa, tener a su enemiga lo suficientemente cerca, solamente debería tolerar tantas palabras carentes de sentido y en ese fastidioso y egocéntrico tono de voz con el que la científica hablaba.
1-10 of 30