(...) *La diablesa extendió su palma derecha esperando que él hiciera lo mismo, Anubis cubrió aquella mano con una sombra, al parecer no era el momento para dicha prueba o no deseaba mostrárselo de esa manera.

___ ¡Ya veo!, Respeto tu decisión.

*Lecciones que estaba aprendiendo sin darse cuenta, jamás le dio importancia al equilibrio, solo era de llegar y tomar lo que le pertenecía celosamente como cual juguete fuera. En cada paso que daba encontraba a seres que le mostraban la vida de otro modo, aunque no está convencida del todo, pero "TODO" lleva un proceso.

___ ¿Influir?.


*Se preguntó, sin comprender en ese momento, más adelante esas palabras que le fueron regaladas por Anubis tomarían fuerza, sin embargo, en ese momento las dejó pasar de largo. Lamentablemente las alamas que tomaban quedaban malditas con tan solo mencionar su nombre, en ese limbo sin descanso, siendo un sirviente para la eternidad, uno más de sus piones en cada batalla ganada.

___ Anubis... Deseo saber que tienes destinado para mi... ¿DEJAME VER?.

(...)

*Esperando la respuesta de Anubis con su diestra mostraba imágenes de como recolectaba las almas ajenas, esperando que comprendiera todo lo que le explicaba a la perfección.

___ No puedo prometerte algo que no está en mis manos y es mi naturaleza de ser.

*Era necesario que Anubis supiera de su poder y su manera de vivir, así que aclaró algunos puntos sobre aquellas palabras que retumbarían en su cabeza por mucho tiempo.

___No puedo evitar que mis fieles me invoquen y que a cambio me ofrezcan sus vidas Anubis, eso es el precio de muchos, cuando no tienen nada más valioso que sus decadentes almas, si ellos ofrecen alma por alma también no puedo hacer nada.

*La diablesa soltó la mano del Dios para llevarla al rostro ajeno de una forma cariñosa y atenta.

___Es mi naturaleza de ser, espero puedas comprenderla, también las almas caídas en batallas banales, por poder y no por justicia serán mías, para que comprendas más mi pensamiento, aquellos corrompidos y que causen caos son míos. (...)

Anubis, con su semblante sereno, escucha atentamente las palabras de la diablesa. Reconoce la pasión y determinación en su voz, así como la importancia que tienen las cosechas de almas para ella. Comprende la naturaleza de su ser y la necesidad de alimentarse de esa energía vital. Este responde con solemnidad, expresando su aceptación y consideración.

-Tu lealtad es un tesoro invaluable y tu habilidad para cosechar almas puede ser de gran utilidad en nuestro pacto. Acepto tu solicitud, pero debes comprender que hay límites establecidos. La cosecha de almas debe realizarse con responsabilidad y de acuerdo con los principios de equidad y justicia. No debes abusar de tu poder ni causar daño innecesario.->>