Interesada desvío su vista caminando hacia la castaña.

— Espero que no lo olvides.

Le dedica una suave sonrisa mirando nuevamente al frente en busca de aquella heladería con algún sabor de naranja.

Pareció no reaccionar al beso, sólo sonríe todavía sonrojada , mordiéndose el labio después. Al ser alejada de la pared y cerca de Alex, la toma por el brazo en esa posición cómoda para caminar juntas.

- Quiero un helado de naranja. Hace tanto calor . . .

Alzó la vista a la azabache.

- No me olvidaré de lo que dijiste.

— Eyra...

Sonríe divertida, hablaba mucho en ese momento ¿Quería evitarla? La azabache baja sus dedos de esos labios aún manteniendo aquella sonrisa. Esos labios se acercan pero dejando un beso en calma en la comisura del labio de la castaña alejándose despacio.

— ¿Por qué no lo averiguas?

Coloca su dedo índice en forma de gancho atrapando una zona de su prenda baja jalandola hacia Alex para alejarla de la pared.

— Vamos por algo de comer ¿Un helado te provoca?

- No sería aprovecharse si tu también estas borracha.

Musita con gracia relajando los labios por el tacto de esos dedos. Eyra centraba sus ojos avellana en la mirada contraria.

- Dime, ¿por qué quieres besarme Alex?

— Es mejor sobria que borracha... Si lo hiciera estando tu borracha estaría aprovechandome de una mujer bajo la influencia del alcohol... No es de confianza hacerle eso a alguien, tengo códigos y valores.

Musita en esa cercania detallando los labios ajenos con sus dedos al acercarlos deslizando con calma estos.

— Es mejor sobria...

El acercamiento fue tan de repente que la espalda de Eyra había golpeado la pared, sonrojandose por la cercanía de Alex.

- Eres muy graciosa.

Dijo levantando una mano, acariciándole el cabello antes de entrelazar un largo mechón oscuro entre sus finos dedos.

- Quieres saber ahora que estoy sobria mmh . . . No sé.

— ¿Hacer lo que quiera? Quiero hacer algo...

Sonríe presionando su pecho al ajeno para acorralar ahora sí a la castaña. Teniéndola contra la pared la azabache ladea un poco su rostro a los labios de la castaña.

— He tenido curiosidad de saber cómo saben tus labios...

Estaba cerca, pero solo la acechaba, apoyo sus manos a los lados del cuerpo de ella sin separarse.

- ¿Huh? ¡No, no! Por dios, malinterpretas todo como el señor Fei.

Se refiere a su jefe, con quien tenía mala relación. Pésima.
Con una risa alta le acaricia el hombro a Alex.

- Tu haz lo que quieras, eres mayor. Si te metes en problemas tu mamá no puede decirme nada.~

— ah... ¿Ya te aburriste de mi? ¿Y si quiero verte siempre que?

Menciona altiva la más alta a la más baja, Alex se sentía en confianza con ella, le podía hablar con franqueza.

— Quizás quiera ser parte de tu desastre y no te das cuenta de eso.

Con los labios fruncidos le mira, pensativa. Se toca el mentón con el índice, ya tenía la explicación.

- A mi no me importa ser un desastre, no tengo nada que perder.

Eyra sin embargo, se aferra al brazo de la azabache con sus ojos suplicante, más seria.

- Pero no quisiera arrastrarte. Tu eres una persona con futuro, se nota. No tenemos que salir todo el tiempo, ¿me escuchas?