— Todos tenemos aquí nuestras políticas, hay quienes aceptan unos trabajos y quienes no. Pero nadie acepta los trabajos de un tirano y si lo hacen es para derrocarlo... Depende de cada persona.

Eh? Ayudarme? Jajajaja! Serás la mesera mas grande que haya tenido jamás! BIENVENIDA SEAS! —

Ahí estaba esa amplia sonrisa y su carisma de nuevo antes de continuar comiendo, sin duda alguna esa mujer atraerá gente curiosa.

¡Ya veo! Te debo una... -Miro su plato de comida y la bebida tan amablemente regalada por el hombre- o varias. ¡Ya se! Te ayudare en lo que pueda mientras estoy aquí ¿Que te parece?

Las miradas habían cesado dejadola mas tranquila, era común que la gente la mirara mal y mas por su gran altura y sus cuernos de oni.-

-¿"Casi"? -Ladeo la cabeza intentando comprenderlo, comúnmente, los gremios se basaban en solo aceptar y nada mas, o eso había leído alguna vez en el diario de Oden.-

— Eh escuchado de esos sujetos.... de hecho... conocí a uno de esos tipos hace demasiado tiempo... Zoro es su nombre.
Pero ciertamente aquí estamos muy lejos de donde pueden estar esos individuos, aún así, veré que puedo conseguirte en cuanto a información —

Los hombres del gremio y la taberna se veían mas tranquilos, parecía que el dueño había calmado las aguas de nuevo y de ahí en adelante continuaron de forma habitual sus asuntos. El castaño de paso se sirvió lo mismo que le sirvió a la enorme mujer y comenzó a comer tranquilo, con la diferencia de que él bebía agua.

— En esta taberna lo que encontrarás son miembros de Alas de Plata... soy el maestro del gremio, nos dedicamos a tomar CASI cualquier trabajo.

-WOOO ! ¿Todo eso? Vaya que si eres un sujeto muy amable. ¡Gracias por la comida!

-Se sorprendió levemente por la sensación de hambre que le había surgido de pronto al ver esa comida, de tal forma, que comenzó a comer rápidamente.-

-¡Delicioso! - Su boca estaba completamente llena, tenia uno que otro pedazo de puré alrededor de su boca.- ¡Ah, Cierto! ¿Has oído hablar de los sombreros de paja? Estoy buscándolos desde hace un tiempo, necesito encontrarlos.

—Interesante...

Dijo en alto antes de comenzar a servir la comida a la enorme mujer, sus palabras fueron por su comportamiento, le sacaban una leve sonrisa además de recordarle cierta peliroja que tenía un carácter duro por igual en ese lugar.

—Puré de papas y algo de carne asada de un animal similar a un jabalí de la región, además de una cerveza cruda, disfrutalo!

— Bueno en esta taberna es donde podrás conseguir información jajaja, dime que es lo que buscas grandulona, te ayudaré si puedo.

Mi nombre es Bayaseto, bienvenida seas, ahora, porqué no tomas asiento y me cuentas tu situación? Te daré una comida de cortesía mientras me cuentas!—

Sus carmesíes ojos se fijaron en aquella masa por unos momentos, ciertamente los clientes y los aventureros del gremio estaban algo asustados pero el dueño parecía muy tranquilo aún cuando ella era casi del doble de su tamaño, siendo que el castaño mide 1.60

- Pues... no soy de por aquí. En realidad buscaba a una persona, pero, parece que no esta aqui, tks!

La mujer de un tamaño inusualmente grande, miro al pequeño hombre que la interrogaba. Se acomodo la gran maza sobre el hombro y se disculpo.

- Lamento si cause un mal entendido.

Que la mujer estuviese tan confundida solo hizo que el dueño de aquella taberna bajara su vaso lentamente para mirarle fijamente.

— No eres de por aquí no es así?... Y tampoco eres una vagabunda....

@Bayaseto Mc Diethel: -Miro a todos lados algo sorprendida, puso su mano en su nuca intentando entrar en sus sentidos, estaba tan confundida que no sabia muy bien que decir.- ¿E-eh? ¿Tra-trabajar? ¿Yooo?