pero no es malo, a él parece gustarle. Bueno, es un perro, todo le gusta, hasta Andi.
Los Viper cada vez parecen más lejos de mi, perdí mi hogar, mi gente, mi madre y a mi padre... Aunque posiblemente a él esto no le importe, siempre me lo advirtió, siempre. Ahora recuerdo cada una de sus palabras, siempre me dijo que nadie me podría regresar lo que perdí al volverme una Viper, curiosamente perdí más al dejar de serlo cuando huí esa noche, aunque tampoco puedo quejarme, en realidad han sido buenos y malos días, más buenos que malos, aunque esto me vuelve a veces más vulnerable... Cómo si la humanidad que desterré volviera de golpe.
Anthony se ocupa de mi manutención, es lo único que tengo de los viper ahora, y sólo él puede ayudarme a volver, pienso volver... Pienso cumplir con mi único deseo en mente, pienso asesinar a Alexander con mis propias manos.
Y aquí es donde comenzamos... Supongo que pudo haber sido un mejor título para esto ¿No? No quise comenzar con el clásico "Querido diario" Creo que no va conmigo.
He estado pensando mucho el hacer esto, pero creo que es necesario plasmar cada día a partir de ahora; ha pasado un mes desde que deserté de la organización, un mes desde que maté a David y poco más de un mes desde que conocí a Andi.
Los días son muy diferentes ahora, asesiné a alguien y a cambio de ello tengo una vida normal, tranquila, sin sangre, balas ni misiones, que irónico ¿cierto? Obtuve más de lo que podría merecer y a veces no sé cómo sentirme respecto a ello, Andi dice que es un regalo, mi vida es un regalo que él me dió, él me salvó esa noche...
Ahora llevo otra identidad, Kaalia ha quedado atrás por ahora. Mi nombre es Lena Dresner y básicamente no hago nada, tengo un perro que se llama café con leche y no, yo no le puse el nombre, quiero dejarlo muy en claro,...
