« Back to Album · Next »
 
Newest First | Oldest First
xKaalia · 31-35, F
— ... —una mirada dijo más que mil palabras, y si se hablaba de la mirada de Kaalia cuando hervía en emociones, era admitir que helaba, era fría, aguda y punzante. Así lo miró, pero no por mucho, pues debía aceptarlo, había bajado y por mucho la guardia. Jaco tenía los nudillos abiertos de haberse molido a golpes a uno de los tipos, juraba que algún cliente había salido volando. Y Moka gimoteaba aún en silencio presa del miedo, otro shock en su corta vida. Kaalia suspiró, su mano estaba hinchada y sus uñas rotas, tenía carne debajo de los restos de éstas, había defendido con uñas y dientes a la cría, y a si misma— Nos ven vulnerables por ella. —soltó sin ánimo de ser cruda, era una verdad ya admitida desde hace mucho. Entonces se jaló la manga del suéter y comenzó a limpiarle a él la sangre de la boca tras escupir— Pero no estuvo tan mal ¿no? Seguimos en el juego, les fue peor a ellos, tenlo por seguro.
Andissiel · 26-30, M
Te volviste blanda ¿eh? —Se reía, para evitar no sacar de nuevo su rabia, que ya estaba bien puesta en los sin vergüenzas que tuvieron la mala suerte, y ahora la condición de tener que pasar el resto de los próximos meses con dolor de cuerpo por la paliza que se habían comido, aunque claro, aquel trio estaba lejos de ser de lo que fue en algún momento, pero como perros de calle, no perdían las mañas. Andissiel escupió un poco de sangre a un lado, mientras se sentaba a su lado— Esos tipejos ya no tienen un puto código ¿Es parecemos gente sin calle para que intenten siquiera hacernos esto? Maldita sea, parecemos unos gatos con miedo, debe ser por eso.
xKaalia · 31-35, F
Hizo un pequeño gesto de dolor, estaba inflamada y con la herida bastante sensible — Hace mucho tiempo que no sentía esto. —bajó un poco la mirada, como sorteando sus palabras— La vida tranquila me robó la destreza. —admite en una sonrisa frustrada, se habían visto envueltos en una pelea con un grupillo de pandilleros que pretendían robarles el auto, menuda ironía de la vida, ser atacados por bastardos sin suerte ni trayectoria relevante en las calles. Aún así se llevó par de heridas por resguardar a Moka, aunque los pandilleros no podrían contar con tan buena suerte, no cuando también los habían molido a golpes.
Andissiel · 26-30, M
—Le acomoda una de las bandas, mientras rascaba su cabeza—

Add a comment...
 
Send Comment