Un suave murmullo recorre el universo, como una vibración sutil que hace eco entre los misterios majestuosos que se ocultan en el interior del cosmos ¿Quién habla? ¿Qué es lo que dice?
Ahora podía saber que ella, sería una mujer, en unos minutos contempló el retrato viviente de una familia feliz, le fue mostrado un recibimiento que bien podría haberse catalogado como perfecto. Se notaba con claridad la afinidad emocional que había en la pareja y el amor hacia su descendencia. Una repentina capa de pesar opaco la escena, se escabullía entre las comisuras de esas dulces y auténticas sonrisas, hasta deshacerlas entre muecas de dolor, pesar, muerte y odio.
Finalmente escuchó la voz que cuestionó si estaba lista para enfrentar su nacimiento, asintió, lo que le fue mostrado era lo que él destino y el tiempo habían preparado para su existir, pero la probabilidad de ver, sentir, interpretar y cambiar el mundo, dependía de cada ser, eso era algo que creía desde su propia cosmovisión, nacer para desafiar lo que no estaba escrito, solo señalado.
Se encontró sumergida en un misterioso cuerpo acuático, el color no era cristalino, parecía poseer un ligero tono blanquecino, hacía resaltar la fisonomía de su anfitrión. Emergió de ese líquido únicamente para hacerla entrar y ahí permitirle conocer más del mundo físico, aquél que la haría realidad, que permitiría que ella dejara atrás el estado de anhelo y se convirtiera en un ser tangible, capaz de dejar una huella biológica, más allá del mundo metafísico.
Le fue mostrado su futuro, al menos parte de lo que estaría por vivir, no había posibilidad de elegir, cada conciencia en el universo, pasaba por una especie de fila de espera y el turno siempre llegaba; a veces se tenía la buena o mala fortuna, de conocer un poco de lo que podría esperarte una vez que se te dotara de un cuerpo físico. Una vez que lo veías, al cruzar esa cortina invisible entre lo espiritual y lo físico, la mayoría olvidaba lo que les era mostrado. .
Ahora podía saber que ella, sería una mujer, en unos minu
Tristemente, eso que ves ahí, no será duradero, tus futuros padres han cometido un pecado contra la naturaleza de su propia especie, en el pecado el destino debe ejecutar un castigo, ese es, la muerte, pues también desafiaron al tiempo mismo.
La voz del Ejecutor, se hizo profunda. Aquella imagen de felicidad, se borró, mostrando únicamente a sus padres de rodillas, junto al pequeño de cabellos negros, los mayores sostenían entre sus brazos, el cuerpo sin vida de la niña.
Tú, serás la ofrenda que ellos darán al universo, volverás ante mí, no en forma de energía, no como consciencia sin cuerpo; serás tras tu muerte, mi mensajera. Ahí finalizó la visión, le tomó por la espalda, apoyando su mentón sobre esos hombros casi inexistentes y le susurró : ¿Estás lista para partir?~
Aquella agua, sería la que revelaría el futuro que le esperaba. No sentiría la necesidad de respirar bajo el agua, no habría sensación de estar mojada, sus ojos solo serían capaces de percibir una serie de imágenes que mostraban fragmentos de vida. Ahí, ella podría observar dos figuras: un hombre de cabello blanco y una mujer de cabellos negros; él acariciaba con alegría el vientre de su amada, ambos lucían enamorados y orgullosos.
¿Los ves? Esos dos, son los que te darán vida, tendrás un compañero, es decir, un hermano.
La visión continuaba, se podía ver a dos niños: una niña de cabello blanco y un niño de cabello negro; la pequeña en brazos de su padre, el niño en los de su madre, parecían una familia feliz. La imagen se ensombreció con una especie de nube que parecía apagar el brillo de la escena misma, borrando las sonrisas que la familia parecía tener.
Él, estaría en el fondo del lugar cubierto por una densa neblina que surgió ante un inesperado descenso de la temperatura. Su " invitada", esa energía con consciencia y razón, había adquirido una forma precisa, " ella" se daría cuenta que la firmeza del suelo en el que aparentemente se encontraba de pie, desapareció, dando paso a una especie de pantano, si es que era posible llamarlo así.
El hombre de cabellos largos y negros se puso de pie y se sumergió en aquella agua espesa de coloración lechosa, nadó hasta emerger frente a ella. Su ojos amarillentos, se clavaron sobre la faz apenas perceptible de ella. A pesar de estar sobre una superficie líquida, la mujer sería capaz de permanecer de pie sin hundirse, desafiando toda ley que pudiera existir respecto a esa relación de cuerpos. Entonces, el Ejecutor actuó acorde a lo que debía, tiró de la figura femenina, tomándola de los tobillos para hundirla junto a él.
Detuvo el flujo de sus pensamientos, no había manera de definir por cuánto tiempo lo hizo, bien pudo ser un par de segundos o eones mismos; el tiempo ante "el Ejecutor" no existía, los recuerdos fluyeron en su ser y entonces salió de su propio letargo cognitivo y preguntó:
-Dime ¿Por qué me has traído aquí? Dicen que los que cruzamos el portal adquirimos una forma y somos privilegiados al conocerte, porque brindas la puerta al conocimiento y reconocimiento de nuestras vidas anteriores y la próxima ¿Acaso he sido elegida para eso?-
Lo que mencionó, fue al cambiar su percepción de su ser, ahora poseía una forma etérea, semejante a la del Ejecutor, una forma femenina. Recordó parte de su vida pasada, era verdad, de algún modo cada consciencia en el universo sabía de él, de sus ilimitados poderes.
[i]- Asumo, que me dirás las respuestas y que nutrirás mi existencia etérea-[/i
Preguntas que resultaban un ciclo infinito de duda, de irremediable desconocimiento, por sobre la propia vida, algo que seguramente no habría de responderse con certeza, pero sí con perspectiva.
Pensó y respondió, mientras cruzaba el portal, más allá de su voluntad, si es que la tenía: -no existo, no si solo fluyo en el universo entre energías y partículas; ahí se encontró, al pensar, hallé la certeza de que existo, soy; estoy bajo una forma que no puedo comprender, pero existo.
Soy el anhelo de alguien en el tiempo, alguien que me hará realidad, que dará forma física, como la que posees o quizás alguna diferente, pero tendré un cuerpo. Seré un ser con sueños, objetivos, ideales, sentimientos, viviré y será ahí que de anhelo, pase a ser un recuerdo.-
Cogito ergo sum ( Pienso, luego existo) – Rene Descartés
El universo caótico e infinito, ese que jamás construye de forma parsimoniosa la vida y que en esa misma violencia puede presentar la muerte a sus creaciones. La cuna de las esencias “Todopoderosas”, que cada mundo bautiza, adora, teme, degrada de alguna manera; el mismo espacio que crea las formas de vida más sensibles, suaves, débiles, simples o complejas, eternas o finitas.
Esa energía constante que se movía por cada rincón de ese complejo lugar, solamente era, no había una definición del “yo”, solo existía como consciencia, se movía como energía, nutría al universo, como las millones de partículas que se desplazan en él.
Algo hacía que su estado se alterara, como si ahora hubiese un capitán que dirige su andar:
-¿Hacia dónde voy?- Se preguntó, mientras esa voz parecía ser la que trazaba la ruta que seguía, haciendo que se traslade de un lugar a otr
Justamente ahí, se encuentra el tiempo y el destino, siendo uno solo, un cuerpo que tira los hilos invisibles de lo que se llama vida. Algo semejante era lo que él representaba, explicado de la forma más simple posible en sus propios pensamientos.
¿Escuchas mi voz? Dime ¿Qué eres? ¿Qué serás? ¿Tienes consciencia? ¿Piensas? Cruza esa puerta, ven a mí y busquemos resolver esos misterios de la vida, aunque aún no la tengas
Soy yo, me llaman el Ejecutor, porque hago que el destino y el tiempo se unan y se cumplan, como una ley que ayuda a mantener en orden al caos Había pausado un par de segundos, y entonces se adelantó a lo que ella pudiera decir, claro si es que podía llamarla así, en realidad sólo era, sin etiqueta, sin significado físico. ¿Es difícil de entender? Lo sé, todo esto responde a leyes que usualmente están fuera del alcance de todos, excepto de las entidades primigenias.
Parpadeó y con la punta de ese dedo índice, que parecía se rompería ante lo tenso que lucía, creó una puerta que conducía hacia él. Daba la posibilidad de dejar de ser un eco y ser visualizado en pleno ejercicio de su voz.
¿Qué somos antes de poseer un cuerpo físico? ¿Existimos antes de nacer? ¿Tenemos recuerdos de eso? ¿El destino está marcado? ¿Es inevitable?
