No tardó en escuchar sus palabras cuando su cuerpo ya se había regenerado por completo, ahora sol quedaba recuperar energías que gasto tanto en el combate como al curarse. —Vamos a comer algo, muero de hambre! — exclamó sentándose para tomar los restos de tela que quedaban de su hoddie y taparse la delantera, logro hacer un top al cruzar la tela por la espalda y después hacer un nudo adelante, hasta eso no se veía mal. Aunque a ella no le da vergüenza enseñar su cuerpo, Shin siempre la regaña por qué no debería enseñar todo así de simple
Voló, literalmente voló por los aires dando un quejido el cual acalló, mas cuando iba callendo su pierna extendida hizo de guillotina mas al ver a la albina en el suelo exausta desvió la pierna a como pudo reventando el suelo al lado de su cabeza. Este dió un largo suspiro y se hechó igual que esta comenzando a reir.
— Jajaja!! Estas demente!! Mírate como quedaste! Bien, supongo que con eso terminamos por hoy.
Se impulso como proyectil hasta aterrizar el golpe en el blanco, el cuerpo se elevó y ella se desplomó pues había usado el resto que le quedaba de fuerzas, al caer termino con el cuerpo recostado y las extremidades abiertas pareciendo una estrella desde arriba, no tardó en empezar a reírse con fuerza mientras trata de recuperar la respiración. —Si, si, muchas palabras y poco actuar. —
Apenas si puso poner ambas manos sobre su abdomen tratando de adivinar la dirección del golpe por como esta lo preparaba, era un hecho que iba a recibirlo llevaba quizá una o dos horas bloqueando y devolviendo golpes pero probablemente ese sería el peor de todos.
—Incluso las prácticas se toman en serio, cualquier tipo de combate es en serio! — gruño respirando entrecortadamente, pese a su ropa termino desgarrada por los golpes ajenos que recibió no le importaba andar enseñando, está demasiado cómoda en su cuerpo como para andar cubriéndose más si está en un encuentro. —El otro día me hiciste vacilar o es que el mago ese que te hizo te dió un potenciador..— bramó a la vez que con una destellante sonrisa y el puño derecho alzado se tiró a dárselo directamente en el estómago aprovechando la altura que ahora ella tenía por la agitación del momento. Sus heridas estaban tardando un poco más en sanar pero esto era debido a que ella se mantenía en movimiento y no deja el cuerpo reposar tan si quiera un momento.
La práctica simplemente se salió de control, el flacucho e inofensivo castaño realmente era una criatura demasiado resistente y tan fuerte como la mujer que tenía frente a él pero su principal destreza era su resistencia; cuantos golpes directos no había recibido y aún así no derramaba ni una gota de sangre ni tampoco cedía ante la presión; lo mas cercano que derramaba a sangre era humo cada vez que la mujer lograba acertarle un golpe.
— Terminemos esto quieres? Ya te desgarraste la ropa por andar de terca! Se supone que es una práctica y te lo tomaste demasiado enserio jajaja!
