— ¿Le había robado la confesión? Le resta importancia y sonríe levemente para si mismo y la rodea con ambos brazos para declarar — Sé mi novia, te amo tanto y no quiero alejarme de tu lado pelirroja
Yo te extrañe mucho más.. -Llevo sus dedos hacia el cabello ajeno acariciandolo suavemente suspirando de felicidad al sentir como olfatea su cuello apretandole entre sus brazos al escucharlo.- Quiero que seas mi compañero hoy y siempre..
Te extrañe, no te imaginas cuanto.. — Decía con voz suave casi sorda solo para que ella le escuche en silencio, beso con cuidado su cuello olfateando el perfume proveniente del cuerpo ajena, era un suave rocío de rosas y galletas de chocolate, tomó aire y todo el valor de sus años bien vividos para confesar — Me siento como un niño a tu lado, por ti soy dulce y frágil, por ti sería lo que fuera..
Tú también luces muy bien hoy, cariño. -Sonrio ampliamente, últimamente lo hacía cuando el estaba cerca y es que él la hace feliz, podía sentir las famosas mariposas en su estómago cada que le sentía cerca, suspira dulcemente por el beso y por como se refugia en su cuello.-
Hoy luces muy bien, preciosa — El reconoció la gran belleza de la pelirroja y en la comisura de sus labios se dibujaba una sonrisa, hace tiempo que no sonreía tanto pero la pelirroja lo hace sentir con mariposas en el estómago, beso dulcemente la frente de ella y luego se refugio en el cuello de ella —
