El origen de Shaël es un misterio, pero lo que han podido descubrir los adoradores del Harat a sido solo la punta. Shaël o Shaëlyela como se hace llamar la criatura repulsiva que aqueja a la tierra en el nombre del Dios plaga, no llegó por voluntad propia ni por azares del destino como castigo o salvación de los hombres. Los creyentes del oscuro pretendían controlar lo que no conocían, así fue como Shaël logró pasar de su dimensión putrefacta a la nuestra. Pero sus efectos no fueron de inmediato notables pues la "bruja" o la cosa, sabía donde atacar. Esperó pacientemente durante mucho tiempo ¡cientos o tal vez miles de años! Observando a la humanidad desde las sombras esperando el momento, así como una bestia hambrienta y traicionera atacó sin piedad. Tomó el cuerpo frágil de una devota de la luz, como un titiritero manejando una marioneta sin voluntad. Infame criatura se burla del Dios de la luz, pero el fuego del Harat quemará su corrompido cuerpo hasta los huesos.