« Back to Album · Next »
This page is a permanent link to the comment below. See all comments »
{...} Sin querer decir mucho más, con la misma gratitud y delicadeza de siempre, Sada le ofreció una reverencia a su hermana antes de levantarse. El ofuro, seguro, estaba ya preparado. Se había encargado de poner un poco de leña en el hornazo, justo antes de tomar un poco de alimento.

No sé si sería capaz de aceptarlo, Sa'Chan. El techo de un hogar sólo debería cubrir las felicidades y la angustia de una familia. Aunque...

Reflexionó mucho lo que estaba por proponer; era uno de esos pensamientos parte cordura, parte irrealidad.

A través de mi viaje, conocí a muchas jóvenes mujeres que han quedado huérfanas por las guerrillas. Mujeres educadas y talentosas que podríamos entrenar.


Mientras el Obi de su yukata raída era desanudado por sus manos trémulas, Sada volteó hacia su hermana. Por primera vez una sonrisa de serenidad y paz se vió atravesar su rostro, por segundos. {...}
 
Send Comment

Add a comment...
 
Send Comment