De un reciente enfrentamiento de las tropas rebeldes y unos ex soldados por la búsqueda de unos intereses valiosos, soldados resultaron muertos y algunos lesionados de mortalidad entre uno de ellos era uno de lo soldados de la inteligencia Rebelde; Okushibo
Cuando sus soldados lo llevaron con una enfermera del lugar el hombre presento heridas por hemorragias causadas por armas de fuego y golpes internos.
— Lo que sucedió...—
Fue interrumpido por su lider y Teniente Tokushiro Tsurumi con una inusual energía aunque el también presentaba heridas profundas pero seguía con postura erguida.
— Eres la única de servicio médico de la zona, déjame decir que es un labor noble y se que podrás ayudar a mi elemento.—
Habló un hombre de porte elegante, bien parecido de una edad más madura.
Quien fuese no era relevante en ese momento, ella tenía una misión: salvar vidas. ¿Era un desastre? Si. Afortunadamente uno que tendría salvación siempre y cuando no perdiera más tiempo. —Eso no importa, necesito que me diga lo que le sucedió. ¿Tiene algún disparo? El exámen visual arrojaba muchos posibles diagnósticos pero si él era capaz de decirle sería bastante ayuda.
¿Escuchó la voz de una mujer?, Era extraño a estas alturas ver a un civil con vida despues de una gran catástrofe, la perdida de sangre lo hacia delirar.
—¿Quién eres?—
Si voz era débil y con fuerza mantenía la mirada al frente por mero orgullo.
