Hizo un claro rodeo de ojos al oír el primer comentario. — Oh, si .. Un chico demasiado bueno. — Percibir esa presencia tan de repente detrás suyo le causaba escalofríos; estás entidades y sus juegos. — Deja de hacer eso que me pone nerviosa. Y con respecto a lo otro.. Tal vez. — Pasó a morder apenas la uña de su índice.

Pero claro que lo soy, no me meto con nadie, soy tranquilo, un chico bueno. —Pasó de estar frente a ella, a su espalda, usando esos actos de prestidigitación consigo mismo.— ¿O estás insinuando otra cosa?

Dio un leve brinco en el lugar sacándola de ese trance. — Habló el hombre más pacífico. — Si, se animó a usar esa venenosa ironía.

¿Le apuntaste con un arma a alguien? —Se le apareció de pronto, de la nada, observándole con una sonrisia burlona.— Qué agresiva.