Sabes? La guerra y la sangre aún me atraen. Fueron heredadas de generación en generación. Pues con la muerte en batalla iremos al Valhalla. Pero... Estan los ancianos, los niños. Las personas que no tienen las mismas capacidades para defenderse u deseos de luchar. Todos ellos van a Hel. No es justo, que por el deseo de unos pocos, muchos sean los que paguen el precio. Ya no soy un desobligado príncipe. Ahora soy el Rey. Un Rey sabio no busca la guerra, pero siempre debe estar listo para ella. Mis guerreros y yo estamos listos para dar la vida en el campo de batalla, para proteger los sueños y futuros de aquellos que tomaron un camino diferente al de la guerra.
Ese apego que tienes por conservar la vida de otros seres con pacifismo me produce náuseas. Odín te educó bajo falsas promesas de paz, cuando todos sabemos que Asgard se construyó sobre conquistas y sangre.
Deberías ser más como él, Thor. Hacerle honor a su nombre.
Ya hubo una vez en la que venci al destino y reescribí la historia. Evité y destruí el Ragnarok. La muerte es algo que no puedo evitar, pero si el fin del mundo que pude presenciar en esa visión. Nuestro encuentro es inevitable, te haré esperar lo más que pueda.
¿No era que el Dios y heraldo del trueno podría sobrellevar cualquier cosa? Tu alma irá directo a Hel, Thor. No hay peor destino para ti que no poder acompañar a Odín en el Valhalla.
Es algo que eventualmente sucederá, Thor. Pero me temo que no será de la manera pacífica que Odín lo hizo. Procuraré que el momento de tu partida sea el peor escarmiento que hayas recibido.
