/Se tomó unos segundos para apreciar lo tan bonita que se veía la castaña al sonreír, ¡era mucho! Deseaba apreciarla por horas. Negó con la cabeza entonces.

¿Los míos? ... Tus labios hacen que quiera besarlos mucho, mucho.

— Rose se había reído, eso ayudó a desplazar un poco su timidez. Antes de que Elina pudiera moverse, siente ese agradable beso que vuelve a robarle una sonrisa.—

Es injusto que tus labios sean tan suaves...

/Como si la comodidad de sus caricias no fuera suficiente, el pequeño tacto contra los labios la toma por completa sorpresa, al punto de tener un suave ardor contra las mejillas. Rose dejó ir su risa, breve e igual de tranquila; esta vez fue ella la que dejaría un beso sobre los tan dulces labios de Elina.

— Cuando estuvo satisfecha, sus manos quedaron descansando sobre esas mejillas. Eli busca dejar un beso fugaz en los lindos labios de Rose. No dice nada, desvía la mirada con una sonrisita. —

/Cerró sus ojos casi al instante que esas manos le brindan cariño. Sus palmas son tan suaves que consiguen relajarla en cualquier momento, lo que hacía las caricias de Elina las mejores de todo el mundo.

Eres un encanto. ♡

— Despacio sus manos se van descubriendo el rostro. Esas mismas manos, buscan acariciar las mejillas de Rose con gentiles toques de sus yemas. Le daba vergüenza, sí. Pero lo encantadora que era esa mujer ameritaba darle afecto a pesar de eso.—

Tú tendrás el mío, Rosie. ♡

¡Solo mía!

/Hay entusiasmo en sus palabras. Para la mayor eso podría volverse realidad, ¿por qué no? Podría repetirlo una y otra vez con una sonrisa, aunque haya rastros de rubor sobre sus pómulos al tan solo decirlo. ¡Ah, era tan linda! Se había inclinado una vez más, esta vez no se separaría demasiado de ese bonito rostro, aunque estuviera cubierto.

Tendrás todo mi cariño, E-li-na. ~

¿Seré tuya? Oh...

— Pronto las manos de la joven estarían cubriendo su rostro enrojecido. Qué palabras tan fuertes.~ Aunque hubiese sido una broma, el significado tenía peso en Elina que se mueve un poco sobre el césped. Ni así no podía quitarse lo que estaba sintiendo. —

M-me gusta tu cariño, no puedo decir que no...

Uuh, me gusta eso, entonces has admitido que serás mía por voluntad propia. ♡

/Bueno, claramente no fue así, pero quería ver su reacción a esas palabras. Por otro lado, frena tu tan animado ataque solo para apreciar el lindo rostro de la castaña.

Estarás en mi jaula de cariño. ~

Si me quedo contigo por voluntad propia, eso no me hace una prisionera. ♡

— Siente cosquillas ella ahora por esa mordida, y removiendose un poco hasta que las manos quedan quietas sobre la cintura de Rose.—

No me gustan las jaulas pero...~