—Me halaga, Su Majestad. Estaría gustoso de estar en su corte. Sería...divertido— Soltó una pequeña risa y su sonrisa seguía siendo tan tenue y juguetona, denotando todavía esa malicia y sed de sangre por la cual era conocido. Los párpados apenas abiertos dejaban asomar las orbes color miel como si fueran presas de pequeñas rendijas, fijas en cada acción que la rubia tomaba. Parecía quieto e inofensivo pero estaba muy alerta a todo: consciente de que Saber se encontraba lista para el combate a la menor provocación y que empuñaba algo pero que no se veía a simple vista. Sea lo que sea, no era Nen pues al utilizar Gyo, no pudo encontrar restos de nada. Debía ser algo ajeno a su conocimiento.
—Sabe...es peligroso viajar sin escoltas. ¿No le parece imprudente venir sola, Su Majestad? No puedo asegurar si bienestar por mí mismo— Rió jovial mientras se mantuvo en su asiento. Sus acciones siempre eran en pos de retar a los demás; dudaba que alguien como ella caería pero no le importaba proba

— Tienes sentido del humor, debería pedir tus servicios.
Comenta con singular seriedad, típica de ella que al parecer no anda de humor ya que la curiosidad le ha llevado a dejar un rato su trono para al menos estirar las piernas y ver a su "conocido" a lo que obviamente no baja la guardia ni tampoco manifiesta que arma trae con ella lo que si está segura es que debe estar atenta a los movimientos de Hisoka.
— Reconozco tu talento, eres alguien distinto; eso debería bastarte Mago.

—Usualmente, la mayoría de sus presas no iban a buscarlo por dos razones: él era demasiado peligroso, pero también él no se dejaba rastrear con tanta facilidad. El hecho de que la rubia le encontrará de esa forma y sin problemas fue porque así él lo quiso. Una sonrisa se había dibujado en su rostro desde el momento que la vio venir, y cuando se detuvo a desmontar, apenas y logró mantenerla tenue como un diablillo que había sido atrapado en su fechoría. No se movió de su lugar ni tampoco hizo otro movimiento que observarla; eso no significaba que no analizara ni tomara precauciones.— ¿me exttañaste tanto, Saber, como para venir a verme? ~❤️ —Decía a tono de burla. Qué mejor forma de recibirla que siendo atrevido desde el inicio—

— Cabalgando a lomo de su caballo, baja de su corcel para acercarse a ese hombre de aspecto delgado pero no por ello débil. Aquellas actuaciones consideradas una mofa.
Sabe que extrañamente hay un alo de misterio que rodea a el mago Hisoka.
Llevando en sus hombros una elegante capa azul, para el frío obviamente se ve que está desarmada hasta acercarse a una distancia prudente. En apariencia no lleva armas ni armadura, sólo su vestido de Rey con la determinación de saber más acerca de tan enigmático hombre. —