Zîa era de intercambios, negocios y caza recompensas. Podía ser una excelente habladora pero dependiendo de la situación una asesina, tenía viejos hábitos arraigados a su ser que aún no se iban, eran cosas que no se donaban si quiera así como esa alternativa de poder de índole demoníaco que muy bien ocultaba.

— Jo~ parece que el idiota nos dejó un vacío... ¡Es nuestra oportunidad!, Para que esté batallando arduamente es porque su jefe aún no escapa.— Acomodó la mira de una de sus armas para apuntar justamente a ese lugar, el punto ciego del contrario que aprovecharía bien para eliminarlo. — Yo disparo, tu... Atacas — Era el último plan y estaba segura que funcionaría.

- No sabía de armas, mucho menos siquiera entendía el porque estaban allí. Laurent era distraída de mas, así que simplemente tomó su forma animal, aquel enorme felino optó por esperar en posición de ataque aquel momento donde sus adversarios se detuvieran a cargar sus balas, estaba segura que su rosa y suave pelaje sería lo último que verían en sus malditas vidas -

— ¡Jajaja! Lo siento, te dije que sería algo tranquilo pero ¿Ya ves? No quisieron negociar por las buenas... Ahora, ¡Prometo que te daré la mejor tarde de shooping!, Sí es que salimos de ésta—

Mantenía a la pantera en una zona segura mientras ella bien osada seguía con los disparos, sí lograba darle a la cabeza del adversario sería más fácil obtener el artefacto por el cual estaban ahí.

P-pero... ¡Todos son tan ruidosos con sus estúpidas armas! ¡Y mira mi hoodie, esta todo manchado! Me debes una tarde de shooping por esto~ ¡Mrarw!

— Oh, ¡Vamos Laurent! Será la última vez que te arrastre a ésto... ¡Lo prometo!—

I don't like this game, Zia~