* La mujer trataba de mantener su labor, sin embargo sus manos temblaban un poco al escucharlo, esa forma tan despreocupada por tomarse algo de tanta importancia, era su vida y parecia no afectarle, a la Ferida se hizo un puño en el corazón, sintió deseo de abrazarlo con fuerza, pero no debía, no podía, no tiene esa libertad, siguió peinando el cabello de su amado en un intento por reprenderlo *
° Tus palabras no parecen las de un Rey sabio, acaso no sientes, cuando hablas asi, duele, sin ti, nada somos las Feridas°

" Cerraba sus ojos, cruzaba sus brazos colocandoles sobre el abdomen, con sus pies arriba sobre otra silla cercana, se dejaba peinar, tan grato es el detalle de la dama para con el, que son aquellos momentos los que hacen que Zet tenga a sus Feridas por tesoros, aquellas ultimas palabras causaron cierta incomodidad ante el Basilio, no le molestaron, porque Daga hablo verdad, no habia?como refutar tal aclaración. "

- Te entiendo Daga, igual, no te preocupes, según la profecía un hombre mitad zorro me matara con mi propia espada, o algo parecido, nisiquiera he visto los detalles, de igual manera, cualquiera que quiera pelea, se la daré, y si muero, quien sea, irá al infierno con migo, tenlo seguro.

° Señor mio, Gracias por sus detalles, gracias por plantar tan bonitas flores °

* Sin mas palabras por ese momento, tomo lugar tras el varon, sentada sobre un banco mas pequeño, en una mesita cercana había una canasta con tres distintos tipos de peines, pasando primero el mas grueso, tomaba delicadamente los cabellos del Rey, los extendía y peinaba con cuidado y dedicación, en aquel lugar es costumbre verlo, peinarlo, ya sea por Daga o cualquiera de sus hermanas, es la razón de que todo estuviese preparado con anticipación en los jardines *

° Amado.. usted sabe, el oraculo Basilio no ha fallado nunca predicción. °

* Siempre tan fria, inexpresiva, insensible, su rostro no cambiaba mucho, pero eso es cuando se encuentra lejos de el, por alguna razon siempre sorprende, siempre crea y toca el corazón, un cabeza hueca sin remedio, pero tan lindo, provoco un temblor en las manos de la mujer, se quedo quieta y lo dejo hacer cuanto quiso con su cabello, tenerlo tan serca era un regalo inmerecido, aspiraba fuerte el aroma masculino del Rey Basilio, no pudo evitar sonronjarse tras aquel beso en su frente, no mencionó palabra, no pudo en el momento, se sintió avergonzada por robar las flores, pero se alegro de saber que podia tomarlas cuando quisiera, prefirió omitir mas detalles sobre las flores, Zet es un peligroso encantador, mientras menos hable, siempre sera mejor (..)

- Es así como tu cabello obtiene ese delicioso perfume, Daga, usas estas orquideas para preparar tus baños, ahora veo porque algunas desaparecen repentinamente -

" No le molestó en absoluto, por el contrario el Rey sonrie, dejando un beso en la frente de la joven, se alejo de forma repentina, dando un saltito corto hacía atras, se deja caer sobre la silla reclinable, extendiendo sus cabellos con su brazo derecho "

- Ahora si, Bendice a tu Rey, dime, que puedo hacer yo para calmar tu corazón atribulado -

" A las afueras del Palacio Basilio, en medio de manzanos y cerca de una fuente, el Varon yace sentado sobre el cesped, con sus pies cruzados, observando los peces, sin nada mas, es entonces que la voz de su sierva llama su atención, el Basilio voltea su mirada, inclina su cabeza levemente, usando su diestra retira los listones que amarran gran parte de su cabello, dejando ver una extensa melena que cae hasta tocar suelo y apuñarse en la espalda del Basilio, habiendo retirado sus listones se pone sobre sus pies, camina hasta una silla reclinable cercana "

- Corinto.., sabes bien, tus detalles son de aprecio para el Rey, antes venid a mi. que he descubierto uno de tus secretos - ,
" El Rey se acerco a su Ferida, retiro el ramo de orquídeas Belicas de las manos de la mujer, con cuidado y con el mayor de los detalles, amarro el cabello de la Ferida con las Flores, creando un hermoso moño de cabello, acompañado de las flores, asemejando una cascada de orquideas..

° Señor mio, he aqui tu sierva que te ama, puedo peinar tus cabellos (?), mientras.. hago mención de ciertas cosas que me perturban ? °

* Como es su naturaleza, la Ferida Albina se inclinaba levemente su rostro ante su señor antes de dirigirse a el con palabras, en su diestra mostraba humilde ramo de flores blancas, la mujer siempre se presenta elegante, con sus vestidos negros impecables, el aroma de su perfume es suave, dulce y a su vez refrescante, su mirada brillaba mientras admiraba los al joven Rey, siempre sin camisa, bien cuidado y hermoso, digno de ser amado, mantuvo silencio esperanzada a la respuesta de su señor. *