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Finalmente llegó el último mes, pero parecía no transcurrir..los días parecían no seguir adelante, llevándome a un punto de desesperación que abandoné mi estado humano por todo el resto del tiempo, arriesgandome de perder mi humanidad.

Cuando el día llegó, yo estaba allí..acostada en el piso, bajo un árbol, dormida. Exhausta de tanto esperar. Necesito volver a ver mi amado, mi rey, la razón que me ha hecho volver a creer que se puede amar con el alma.

-Tres meses..pero...que será de nosotros..? Porqué debes quedarte solo??-

Cuando David me anunció sus intenciones, de inmediato me negué rotundamente. Me parecía un verdadero abandono y por el primer mes lo odié...lo odié con todas mis fuerzas, llorando por las noches.

Con gran esfuerzo Daris trató de consolarme, intentando no hacerme sentir sola, pero de la rabia, pasé a la tristeza, hasta que no encontré la tranquilidad en la actividad física.
Loa lobos de David siguieron mis pasos, como un branco guiado por un zorro blanco. Fortaleciendo mi cuerpo, creando un unión más fuerte con el dragón blanco, ahora nuevo inquilino de mi cuerpo. Mis guardianes híbridos encontraron un espacio en el bosque en donde merodear, como almas guardianas.

\ Un adelanto del capitulo siguiente a la trama de Varist \
" Despues de tres meses en las cavernas profundas de angustia, la luz de la luna ilumina los ojos de David, pasaría el Rey en medio de oscuridad, hambre y soledad, lejos de su mayor amor, Ara, aquellos noventa dias fueron de entrenamiento bruto, táctico, emocional y espiritual, su cabellera se alargó, al sobrevivir, los tres mantos sagrados de angustia otorgan al Rey una tunica nueva, no tiene ningun poder, es solo para verse limpio y presentable, como un digno Rey ante su mujer, no sabe si lo esperan fuera, o que cambios pudieron ocurrir, aquellos tres meses eran de aislamiento total, una distancia que pudo fortalecer a la pareja antes de su matrimonio o destruirla. "