Ahora sí, deja escapar una carcajada pues no se esperaba que se lanzara tan rápido hacia ella, levanta las cejas varias veces de manera juguetona. —Fue tu culpa por creer que estaba desnuda—. Echa la cabeza hacia atrás para mirarlo totalmente divertida.

Corrió con toda prisa tropezando con el asiento, solo se quejo por el golpe y escondió el rostro sobre el pecho de su amada... vil mente engañado pues al parecer si lleva un ligero sostén del mismo color de la piel.— ops, pensé que no tenías nada. — Abrazándola por la espalda.

—¿En serio? ¡Bueno!—. Deja escapar una risa para arrojar lejos el libro.

— Si no te cubres voy a juntar mi rostro en el lugar del libro.