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Neutro, Calmado [ R O L ]
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User1526032 · 26-30, M
-El castaño concluyó por sonreír, era agradable la sensación, pero estaba cansado, el trabajo físico era su fuerte, por lo que apresuró las acciones, limpiando todo rastro de shampoo del cabello y rasgos del peliazul, y peinándolo hacia atrás- Te ves bien así...-Dijo al final, ladeando el rostro y acercándose para besar su mejilla, removiéndose entre sus manos para culminar por dar un nuevo suspiro que acalló con su dorso-
 
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LN1529127 · F
Mode Out: No hay problema, te entiendo. Andaba en las misma así que, discúlpame ahora a mi por mi pequeño retraso . .

Mode On:

No emitió palabra alguna por su risa o por lo ultimo mencionado por el varonil joven, siguió igual de 'poco expresiva' y serena hasta tener que ver un momento que le fuera realmente preocupante. Así estuvo hasta que oyó las siguientes palabras del otro quien parecía dudar de esa versión suya, pero podía entenderlo pues debido a esa apariencia que llevaba era muy dudable que ella se metiera en esa clase de problemas.

Pero había un error por parte de el que la peli-negra pronto se lo aclararía o trataría de aclararle, ya que la idea de decirle completamente la verdad no era del todo buena más si este era un humano. Ladeó a un costado su rostro sin apartar esa mirada violeta de su supuesto secuestrador dejando por fin salir palabras de sus labios . . .


Por que no soy una simple 'niña'. Para ellos soy vista como un trofeo, después de todo ya me conocen . .
Nada había sucedido, todo estaba igual entonces ¿Qué fue lo que sucedió? ¿Por qué el Aoi Neko no tiró del gatillo? “Ah, ya veo.” Pensaría finalmente aquel Dragón mientras aun se mantenía con su mirada fija en el muchacho. La tensión en su rostro lo delató, terrible error. –Bueno, hiciste el intento eso para mi cuenta. No sé si para quien trabajas valga algo. –Le dijo el Tuerto mientras subía su vista hacia su mano derecha y le templaba con fuerza para hacer que la cadenilla de la esposa cediera y se hiciera pedazos para ahora dejar libre su diestra, suspiraba mientras intentaba lo mismo con su mano izquierda. A los segundos de quedar libre sus manos este revisaría sus muñecas divisando lo marcadas que estaban, volvería a suspirar, al parecer estaba decepcionado. Ahora su torso doblaría para ir hacia sus pies. -¿Cuánto tiempo me queda? –Cuestionó mientras su pie derecho liberaba luego de partir la cadena de las esposas que aprisionaban su tobillo.
El Destino siempre hace extrañas jugadas, a veces las anticipas y otras no tanto. Siempre serás el juguete de todo esto, que hace lo que tiene que hacer por mandato de una fuerza más grande y más importante que tu. El Dragón mientras escuchaba al muchacho desenvolverse a través de aquel móvil, él adormecería su mirada por un momento, la oscuridad que se puede ver cuando se cierra el parpado estaba allí, lista para él. Pero ¿acaso el Dragón usaba la oscuridad para relajarse? ¿O es que le daba cavidad dentro de sí para que tanta oscuridad habitase en él? Sentiría una superficie fría en su piel y cuando de nuevo despertaría su mirada escucharía al instante “Cambio de planes” de su secuestrador “El Aoi Neko es muy astuto” concluiría, no hubo perturbaciones en su semblante, se mantenía serio y quieto, si tenía que hacerlo que lo hiciera, sería interesante ver qué pasaría si recibiese una bala en su cabeza –Do it. –Le diría en un bajo tono a casi susurro de encantamiento mientras su mirada se concentraba en los ojos de la persona que lo amenazaba con el instrumento- Do it…-repetiría, sus manos se volvería puños y ejercerían cierta fuerza que cuando sus brazos se tensaban se escucharía como las cadenitas de las esposas empezaban a ceder. -¡DO IT! –Repitió con más afinque en su tan usado ingles haciendo que en la habitación las paredes se asustasen con su grito eufórico.
Rol Mode Off: Disculpe por las molestias pero mi personaje se me estaba haciendo aburrido así que retorne al anterior. Espero su compresión y sin dar más pretextos daré inicio al nuevo Rol.

Rol Modo On:

¿A donde había llegado a parar? No tenía esas respuestas, lo que tenía era quizás todo lo que podría conseguir gracias a su personalidad sumisa e temerosa pero gracias a los dioses que tenía a su Guardián con ella. Dando pasos cortos y precavidos, dirige su mirar celestina alrededor suyo percatándose de todo y de todos para así darse una idea de que clases de lugar permanecía. Sin perder aquel brillo de desconfianza que daba a todo ser humano que clavaba su mirar a su silueta, solo lograba apretar con fuerza el brazo del muñeco que estaba en su diestra tomando como respuesta suya un pequeño quejido de molestia. Moviendo con rapidez su zurda en forma de disculpa hacía el animal de felpa solo recibió silencio consiguiendo una pequeña sonrisa en aquellos labios carmines que poseía la joven.

Ten más cuidado.

Un susurro que muchos escucharon más pocos sabían de donde provenía, asistiendo continuo su andar mostrando ahora un porte más seguro y confiado aunque en su interior era otro caso. La brisa repentina erizo su piel mostrándose mayormente en su vestimenta pues para evitar un bochornoso momento cubrió su falda escolar con sus puños bien cerrados. Ruborizándose al instante da un prolongado suspiro calmando así el color en sus pómulos, volviendo a retomar su caminata. La azulada daba pasos ahora más tranquilos escuchando como sus tacos oscuros, cubiertos por una fina capa de polvo, hacían un sonido un tanto placentero y desequilibrado para la joven dando así el inicio de unas medias negras un poco más arriba de sus rodillas con un bordado que lo adoro a penas fue visto.

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La camisa blanca era más ancha y alta que su actual torso más lo había elegido por hacer conjunto con la falda oscura con bordados blanquecinos. El atuendo que utilizaba no era uno que quería debía de poseer, pues no era lo que parecía (una estudiante &/o una “maid”), sino uno obligatorio que se le fue entregado por ministerios de comunidad en los lugares donde visitaba. Un quejido salió de sus labios por el paso apurado de unos de los transeúntes, quizás no fue vista del todo, escuchando una risa en su interior, Charlotte, lo tenía claro. Tomando asiento al llegar a un parque de la ciudad, empieza a hacerse una pequeña trenza para pasar el rato mientras tenía entre sus dedos sus mechones azulados sintió la mirada de su animal de felpa. Aquellos botones oscuros se clavaron en su cuerpo como si pudiera ver su alma de paso, vistiendo un esmoquin verde con camisa blanca e corbata roja era sin duda alguna una buena copia del muñeco más vendido hace tiempo atrás: Babar, el elefante.

¿Qué fue eso?

¿Qué fue qué?

Sabes lo que digo, si vuelve a pasar, ya sabrás lo que ocurrirá.

Lo sé, ahora no molestes. Ya muchos me observan raro por hablar con un peluche.

Eso dolió Yuhi.

Riendo el pequeño animal sin ser visto, claramente, por la multitud pues hizo como si se hubiera caído gracias al viento cubriéndose así con la mochila de cuero marrón, gastado, más lo hizo minutos antes de su pequeña practica no notando como algunos seres observaron la escena con clara sorpresa.
User1526032 · 26-30, M
-El menor soltaba pequeños bostezos de ves en cuando, ayudandole al otro a limpiar su propio cuerpo, con la mirada tenuemente apagada, deslizó los dedos atravez de su cuello, y se mantuvo despierto centrando su atención en los ojos del otro, ladeando el rostro, como tratando de entender más del peliazul- Uhm... es mejor que te apures, me congelo..-Musitó con una pequeña sonrisa antes de tomar aquel líquido pesado del shampoo para ubicarlo sobre la cabellera del otro, masajeando con delicadeza allí-
LN1529127 · F
- "No apareces en esta base de datos. ." esas palabras resonaron en su cabeza y por supuesto, le entendió perfectamente. Aquel chico trataba de tener información de ella quien sabe para que o quien, lo que si sabia era que no lograría tener información de ella así de sencillo, no hay.

Cada segundo parecía estar más despreocupada pero alerta a cualquier movimiento que pudiera hacer incluso lo mostraba en su rostro. . . No le tenia confianza cierto, y no deseaba confiarse hasta saber que no era amenaza alguna para ella no importa si tratara de sonar amigable. -


– ¿No te interesa? significa entonces que no trabajas para el. - Comentó para luego proseguir con su respuesta. - NO robe. Ellos me robaron a mi y me quitaron mis pertenencias. Yo simplemente tome lo que me pertenecía. . - Finalizó seria y segura de sus palabras. -
☾ En aquella oscura, donde toda pesadilla se hacia realidad y de las mas temibles criaturas albergan las sombras..la chica de cabellos rubios, corria con mucha prisa, al parecer ''escapada''de uno de estas abominaciones la perseguia, su ropa estaba algo rasgada y tenia algunas cortadas largas en sus piernas al igual que sus brazos, esto es debido a las peleas que tuvo contra otros anteriores que buscaban a hacerle daño , pero victoriosa ella triunfo contra ellos.
Muy exhausta, recosto su espalda contra un arbol, cerrando sus orbes azules, se enconje de hombros, manteniendose callada☾


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User1526032 · 26-30, M
-El castaño se removió un poco inquieto ante la última pregunta y asintió de forma lenta, deslizando su cuerpo mucho mas abajo, hasta casi cubrir su boca, elevando su mirar hacia el peliazul pegándose nuevamente a su torso para recargar allí su cabeza- Tengo sueño...-Volvió a musitar, dejando de lado la anterior conversación para rozar su cuerpo con el ajeno, aunque sin quererlo realmente-
ElliotMakerSewhd · 26-30, M
-Sintió el jalón de su cuerpo y en un acto rápido hizo que le soltara giro su cuerpo y camino con tranquilidad en regreso-

"Sube a ese árbol, yo calmare a los perros"

-indico el árbol del costado, sus orbes divisaron a los caninos, espero a que aquel peliazul estuviera arriba y sin duda alguna los perros ya estaban frente al castaño, por un momento sus orbes se volvieron carmines.

Los animales al notar aquel tenebroso acontecimiento bajaron sus orejas y chillaron un poco, el joven castaño se puso en una de sus rodillas y abrió sus brazos mostrando que a los caninos que no les haría ningún daño, mismos que se acercaron con cautela, sus manos acariciaron a los mismos-

"No.. son malos cierto?... ustedes son unos perros hermoso~... vamos.. cálmense.. no necesitan seguir ordenes de humanos"

-Comento para aquellos y en un momento estaban del lado del castaño, tal vez había gente detrás de los perros por lo que no exclamo que aquel peliazul bajara-