*solo le esta escuchando sin mucho interés, pero sus labios forman una sonrisa burlona al ver como el otro sujeto comienza a molestarse* Jeje.... Vaya-vaya... *al ver sus movimientos, los sigue solo con la mirada, al tenerlo detrás de él, hace una jaula negra en cual encerra al chico, se voltea hacia a él aún con la sonrisa presente en sus labios* No puedo ser tocado.
-Su ceño se hace más visible cuando el chico empezaba a hablar Si yo soy imbécil éste tío es nativo. ¿Cuál es su problema?, pensó. De igual forma no retrocedió sino que le sostuvo la mirada. Sus ojos eran tan pálidos que podía ver su mirada enojosa en aquellos. Había llegado a una situación absurda de una forma más absurda. ¿Debería decirle que se largara, pegarle el puñetazo o qué? Finalmente luego de cavilar, resolvió sosegar su semblante, sonriendo con cinismo. Se le estaban adormeciendo los ojos por no parpadear, pero escupió con una voz falsamente amistosa- Vale. Tienes unos segundos para correr y ponerte a salvo. -Pateó el suelo entre la distancia de estos dos, aglomerando un montón de tierra en el aire que también lo ensuciaba- O, mejor dejémonos de chiquilladas y ven a cabrearme de verdad. -Desabrochó la chaqueta de cuero rápidamente, mientras hizo un salto ágil en el mismo perímetro, detrás de él. Iba a lanzar una patada en la espalda, pero permitiría que se largase-
*sin hacer un paso hacia atrás al tener el chico tan cerca de él, solo le esta mirando con frialdad * No es poder de hada, imbecil...y si quieres romper mi cara, adelante... Pero antes tienes que atraparme bien. *dice burlando sin quitar sus ojos de sobre aquel sujeto*
Ah, ¿tus poderes? Qué bien, qué bien. -Se admiró con evidente sarcasmo, soltando una risita por lo bajo- ¿Esa técnica fue... Joder el culo de alguien? -Le espetó sin molestias- Escucha, no me importa quién seas tampoco. -Puntualizó alzando una ceja oscura, mirándole con toda la fijeza de sus frías pupilas verdes. Plantándose frente a él- Pero... -La diferencia de tamaño no era mucha. O eso debía ser, pues, por su parte, Hakku medía 1.82 centímetros- si continúas molestando te romperé la cara sin necesidad de poderes de hadas. -Su voz era casi un susurro, estaba tan cerca que no hacía falta alguna gritar-
*solo hace una sonrisa picardía* No fue brujería...es uno de mis poderes. *se cruza los brazos* No me importa como me llamas... Eres solo un mocoso pequeño a mi lado.
-Aturdido, lo contempla desde el suelo en una pose ridícula unas milésimas de segundo- Ah, qué clase de brujería fue esa. -Gritó recuperándose rápidamente del golpe, enderezándose en el acto. Ya de pie lo señala con el dedo índice. Las pupilas verdes dilatadas- No. Ahora pienso que eres raro, mucho. ¿Tienes poderes o qué rayos? -Lo mira con ceño, junto a una aire de fingido desinterés-
*solo sonrie cerrando los ojos y un agujero se hace presente delante del otro chico haciendo lo que se cae en él y cuando el chico toca el suelo, ya se encuentra delante del aquel sujeto misterioso, mirándolo* Tu dijiste, soy misterioso.
—¡No me molesta porque no tengo casa! -Suspiró, una renovada sonrisa relajada podía verse en su boca, mientras daba un giro ágil para gritarle en respuesta ello- ¡Hasta luego, sujeto misterioso!
*solo esta mirando al chico sin algún expresión en su cara luego sus labios forman una sonrisa maliciosa * Quédate por donde te vas, tal vez ya no vas a llegar a tu casa.
-Sus ojos se enroscan sólo unos segundos mudando a un semblante inexpresivo, para terminar con un breve ataque de risa- ¿Ajá, según quién...? Pierde cuidado, no me gustan tan creídos, mocoso. -Niega con la mano un par de ocasiones, sonriéndose con burla, mientras usa la misma mano para despedirse. El chistesito que obtenía por ser cortés y saludar-
