—Ella también amaba mucho a sus padres pero como no podía decirlo simplemente dio palmaditas en las bonitas manos de su madre—

Mami y papi te aman mucho mi pequeña niña *sonreía mirando sus acciones* y tienes unos ojitos preciosos

—Movió sus bracitos de un lado a otro antes de tomar una mano de su madre con sus dos manitos—

*se sentaba mirándola entre sus brazos, aunque no le entendiera del todo le prestaba atención, dándole un beso en la mejilla* vaya, eso es mucho

—Eructó por las palmaditas en la espalda, al escuchar aquello rió y balbuceó le estaba contando cómo estuvo su día aunque realmente nada se le entendiera—

*le daba suaves palmaditas en la espalda abrazandola aun, sonriendo al escucharla* ya quiere hablar la princesita?

—Cuando se llenó por completo dejó de comer y comenzó a hacer balbucear—

*sonreía al sentir el apretoncito de su hija, dando una caricia a su cabeza*

—Sonreia mientras comia, apretaba sus manitas en el pecho de su madre suevemente como si intentara reconfortarla—

Eres tan hermosa mi pequeña, ojala tu abuela pudiera venir *la miraba mientras seguiría dándole de comer, ya que no había sentido el pañal sucio*