Eso lo tomó por sorpresa, tanto que en su rostro se mostró esa emoción, ahora era él a quien poco le importaba el nerviosismo que le causaba la cercanía de la bella maga. Entonces él dejó a un lado esa pena y decidío hablar como su corazón se lo pedía.
— Sindria es el hogar que me adoptó, jamás me sentí en casa ni estando en mi propio reino,¿pero saber algo?, he encontrado mi lugar junto a tí y eso fue lo que sentí la prímera vez que te ví y estaba enojado porque no sabía por que me sentía así, pero ahora lo sé y es tan claro como el color de tus ojos—
Dicho esto sonrío de forma amplia, el moreno acababa de mostrar su gran felicidad con sinceridad.