Se escuchaba el estridente ruido característico de el sexo más rudo y vulgar que se pueda experimentar. Sumado a las suplicas de una sidekick de excelencia que estaba siendo abusada por su mentor. El héroe veterano Wild Tiger y la chica rica Creati.
No es la primera vez que ocurre algo así. Con el par siendo víctimas de una habilidad enemiga que los hace perder toda clase de frenos y terminan cogiendo como adictos.
Aquí es donde su entrenamiento es puesto a prueba. Su cuerpo atlético tiene que resistir las salvajes embestidas que amenazan con botarle la columna. Su coño debe amoldarse al tamaño y vigor de ese pene potenciado o será desgarrado. Con cada recogida, el interior de su útero es visible, pegado al glande felino, solo para ser empujado en su lugar otra vez.
Se aferra a las sábanas. Y en esa cara de sufrimiento, con saliva corriendo por su mentón y pupilas desvanecidas, hay un disfrute morboso. Quizá fue ella quién usó su Quirk de creaci
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El efecto no pasa por más que pasen las horas. El quirk del villano ha afectado más de lo esperado la mente del héroe que se ha interpuesto para salvar a su sidekick.
Apenada por la culpa, entró al cuarto donde el veterano héroe se había encerrado para dejar salir su estrés a base de puñetazos y rugidos, siendo aquel el momento en el que marcaría el destino de su cuerpo.
De la boca de Wild Tiger sale baba por las comisuras y aprieta sus dientes con tanta fuerza que parece que se van a romper. Sus ojos que suelen brillar en azulado resplandor por su quirk, el Hundred Power, relucen en rojo de ira mientras mueve las caderas hacia adelante con fuerza de 100 hombres. La cama está empapada en sudor y las diminutas ventanas empañadas. El vapor es tan denso que prácticamente se puede observar y la héroe Creati se ha visto sometida no por un villano... sino por el héroe que tanto admira.
