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RaidenShogun · 31-35, F
Apenas y alcanzó a reaccionar tratando de cubrir sin éxito su cuerpo de ese ataque repentino por parte de la sacerdotisa. Sin embargo Ei se quedó quieta, mirar a Miko así de animada le causaba alegría pero a su vez en su interior algo se estremecía. Su familiar había cambiado, ya no era ingenua, en realidad podría decir que se trataba de la persona más astuta e inteligente que conocía y por ello confiaba en su criterio. No escatimaba al decirle si algo podía salir mal e iba directo al grano. Aunque para Ei, en su plano onírico todo permanecía igual...en realidad el mundo y las personas no habían dejado de avanzar. — Que poco honor tienes, Miko.— se cruzó de brazos y sonrió ladina. —
YaeMiko · 31-35, F
Se sentía bien. El agua, la brisa, y sobre todo la compañía de aquélla a quien debía guiar y proteger, esa alma pura e ingenua que trataba de encontrar su verdadero lugar en el mundo. La miró de reojo dando lentos pasos, adentrándose en el agua decidió jugarle una travesura. Se inclinó lo suficiente para que su mano pudiera lanzar un perceptible rocío hacia Ei. —Piensa rápido.~— Canturreó su voz dulce, divertida, y después dio media vuelta, llevando las manos a la espalda para entrelazarlas. —No tomes venganza o jamás te voy a perdonar.— Con su mejor cara de inocencia, solo superada por lo adorable que era en su forma de Kitsune, como si no hubiese hecho nada malo, intentó buscar la absolución a las consecuencias de sus juegos.
RaidenShogun · 31-35, F
No solo su gente estaba haciendo todo lo posible para que Raiden disipara la tempestad que rodeaba Inazuma. Ei por su parte aún trabajaba en todos esos cambios y no dejaba de ser aterrados. Venían mejores tiempos para inazuma aunque esto implicará abandonar momentáneamente su mundo onírico. La cercanía de su familiar sin duda le traía paz, le traía recuerdos y eso era suficiente para llenar de valor a la arconte. Le siguió, imitó sus movimientos para quitar su calzado y se adentrarse a ese lago y sentir el agua fresca con ellos. Miko sin duda se había esforzado mucho para recuperarla, debía aceptar que había sido un poco egoísta pero aún no, aún era demasiado pronto ceder ante esos pensamientos de cambio.
YaeMiko · 31-35, F
—Exacto, cambiar toma tiempo. Pero lo lograrás, Ei... jamás olvides que no estás sola, ya no tienes que estarlo.— Apretó su mano en cuanto ella lo hizo, más la Kitsune fue un poco más atrevida y se acercó, para dar una caricia con su nariz en el mentón de la Shogun. —Anímate, ¿Acaso no se ve hermoso el porvenir? Tanto como este campo tapizado de cerezos. ¿Cuándo fue la última vez que estuvimos juntas disfrutando de algo tan simple, tan efímero y tan bello?— Le soltó, antes de agacharse con una elegancia casi sobrenatural, para quitar su calzado, estaban cerca de un lago. —¿Tendré que obligarte a venir conmigo?~— Se irguió soltando una risa tan suave como la brisa que arrancaba los pétalos de los árboles.
RaidenShogun · 31-35, F
¿Cómo podía decirlo?. Aún estaba en un proceso, mirar esos.petalos de cerezo caer era el perfecto ejemplo del cambio al que no quería verse sometida. Sin embargo las cosas habían comenzado a suceder, su pueblo, aquellos que le rodeaban necesitaban una acción por parte de Ei. Suspiró apretando ligeramente la mano de Miko, ella quien a pesar de tanto tiempo no le abandonó, tampoco quería perderla en el proceso, a ella, a nadie. Pensativa bajó la mirada. — Entiendo. — sin mucha emoción agregó. — Pero hay un problema. La voluntad de Raiden sigue siendo algo que no he podido modificar, tomara tiempo. — con total seriedad expreso.
YaeMiko · 31-35, F
—Buena respuesta.— La elogió la sacerdotisa, dejando entre sus dedos los pétalos que habían caído en su mano. Su mano se cerró sobre la de Raiden, sujetándola, para guiarla caminando a través de ese campo tapizado de pétalos de cerezo, era como estar dentro de un mundo onírico. —Con el apoyo de Sangonomiya y su gente, regresar a Inazuma a un estado de equilibrio será mucho más sencillo. Y no solamente ella está dispuesta a respaldarte, he escuchado que la Flota Crux Meridianam está abierta a favorecer nuestras vías comerciales, trazar una ruta para quienes soliciten sus servicios.— Una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios. —Hay que hacer algo respecto a la voluntad de la Raiden Shogun que aún azota los mares que nos rodean, sin embargo.— Y se acercó a ella, dando un suave golpecito con su cadera.
RaidenShogun · 31-35, F
Tener que tomar decisiones y acciones fuera de la Eutimia resultaba ser algo complejo cuando era Shogun Raiden quién se encargaba de eso. Las palabras de Yae hicieron eco en su cabeza, permaneció en silencio observando fijamente los pétalos que caían en su mano. Pensaba su respuesta, quizás me daba más vueltas de lo necesario pero así era, debía gobernar de diferente manera, ese era el cambio que necesitaba Inazuma...pero el cambio era sin duda un enemigo de la eternidad. — Las guerras perturbaron mucho tiempo al pueblo, a la gente y sobre todo la eternidad que les prometí. Así que es un buen comienzo, acabar con las guerras y comenzar a trabajar en conjunto por Inazuma. — Había aprendido mucho de la viajera, sus consejos y su forma de ver el mundo sin duda había impactado en Ei quien a pasos pequeños comenzaba a tomar riesgos.
YaeMiko · 31-35, F
Era tan pragmática, aparentemente su querida amiga no podía ver más allá de su nariz. Yae levantó la mano libre, pues la otra tomaba la de Ei, y cubrió sus labios mientras dejaba escapar una suave risa. —Más bien, me refiero a tu gente. Has visitado el pueblo, ¿Cierto? Todos se ven más felices, incluso Sangonomiya Kokomi ha venido al Santuario para tener una audiencia, desea declarar oficialmente el fin de la guerra, es una chica interesante.— Hizo una pequeña pausa y extendió hacia el frente su palma, un par de pétalos cayeron sobre ella. —¿Qué opinas sobre eso, Ei?
RaidenShogun · 31-35, F
Se siente bien aunque no sé si es correcto llamarlo como tal, paz. Aún hay muchas cosas que hacer por Inazuma, deje mucho tiempo a cargo a Shogun sin percatarme de los grandes problemas que se desencadenaron. Habrá que hacer algunas mejoras para que no sea tan fácil de manipular y prevenir eventos similares a futuro. — Miró al frente, los pétalos sin duda lucian hermosos. —
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